Después de
nuestra ofensiva de julio de 1944 y al liberar la ciudad de Lvov,
nuestras tropas avanzaron hasta el río Visla, lo cruzaron y ocuparon el
territorio en la orilla occidental.
Los alemanes
contraatacaban continuamente a nuestras tropas, poniendo en peligro su
situación.
Para frustrar
los contraataques enemigos, nuestros mandos confiaron plenamente en
nuestra aviación, sobre todo en la aviación de asalto. Finalmente todos
sus contraataques fueron frustrados y el enemigo quedó desmoralizado.
Los soldados de nuestra infantería decían, que “el campo de operaciones
de Sandomir se mantuvo en nuestro poder gracias a los Shturmovik”.
La situación
en el aire en aquel entonces estaba a favor de nuestra aviacion:
nosotros ya teníamos la superioridad numérica y teníamos el dominio
total en el aire.
A nuestro
escuadrón formado por 8 aviones IL-2 fue encomendada la misión de
frustrar el contraataque de los carros de combate enemigos.
Normalmente
desde el puesto de mando del Comandante del Cuerpo recibíamos la orden
unos 25-30 minutos antes del despegue, y a veces incluso en menos
tiempo. Por consiguiente, todo el personal de vuelo, y sobre todo el
líder del grupo tenía que conocer a la perfección la zona de operaciones
al mínimo detalle, saber orientarse “con los ojos cerrados” y saber
localizar rápidamente los objetivos. También fue así esta vez.
El líder del
grupo era Capitán de la Guardia Balabin. Su segundo era yo.
Cuando hasta
la línea del frente faltaban 3 o 4km, el Comandante del Cuerpo precisó
por radio los objetivos y nos ordenó: “frustrar el contraataque de los
carros de combates a cualquier precio”.
La formación
de combate era la siguiente: dos grupos, de 4 IL-2 en cada uno de ellos
iban a una distancia de 200-300 metros entre uno y otro; el segundo
grupo iba unos 50-100 metros más bajo. Los cuartetos de IL-2 iban en
formación de escalón derecho, con intervalos de 40-50 metros entre cada
avión.
La escolta de
cazas estaba formada por 2 grupos de “Yak”. Cuatro de ellos formaban el
grupo de escolta cercana e iban a 400-500 metros por encima de nuestra
formación. Otros 2 cazas formaban el grupo de combate e iban 800 metros
por encima de nuestra formación.
Cruzamos la
línea del frente a 850 metros de altitud. Cuando llegábamos al sector
del objetivo, detectamos hasta 20 carros de combate y vehículos
blindados de cadenas de transporte de infantería, que se estaban
preparando para llevar a cabo el contraataque contra nuestras
posiciones.
Cuando los
alemanes descubrieron nuestro grupo, retrocedieron e intentaron
ocultarse en el bosque, pero era ya demasiado tarde.
El líder del
grupo Balabin dio la orden: “Formad el circulo. ¡Por la patria!”. Todo
nuestro grupo entró simultáneamente en picado para atacar a los
blindados, disparando con cañones, y seguidamente cada IL-2 lanzó un
contenedor de bombas PTAB, cerrando el “circulo” al salir del ataque.
En primer
lugar todos nuestros aviones se ocuparon de los antiaéreos de pequeño
calibre, instalados en los vehículos blindados de cadenas de transporte
de infantería. A pesar de la gran cantidad de antiaéreos, cuando
realizábamos la tercera pasada todos ya estaban neutralizados. Los
ataques contra los antiaéreos fueron realizados picando desde 800 metros
de altitud hasta pasar a vuelo rasante. La distancia entre los aviones
“en circulo” era de 500-600 metros.
Durante la
cuarta pasada aparecieron 2 FW-190, que tuvieron la intención de atacar
en vuelo rasante a los IL-2, pero al ver que la formación estaba bien
organizada, no se atrevieron a acercarse a nosotros y se mantuvieron al
margen.
Realizamos en
total 7 ataques y cuando agotamos toda la munición, el líder del grupo
Balabin ordenó finalizar la misión. El grupo fue reunido “en serpiente”.
Cuando
estábamos cruzando la línea del frente, el Comandante del Cuerpo, el
General-Leytenant de la Guardia Ryazanov nos transmitió por radio: “buen
trabajo, veo 5 carros de combate en llamas”. Seguidamente envió
agradecimientos por radio a todo nuestro grupo.
Como
resultado del ataque, nuestro grupo eliminó 5 carros de combate, 4
vehículos blindados de cadenas de transporte de infantería y 2 baterías
de artillería antiaérea de pequeño calibre. El contraataque enemigo fue
frustrado finalmente.
CONCLUSIÓN:
1)
Considero que la formación más efectiva y más cómoda para los Shturmovik
a la hora de atacar a los carros de combate enemigos contraatacantes es
el “circulo”. Actuando de esta forma, en “circulo”, todas las
tripulaciones tienen:
-
libertad de maniobra;
-
libertad de selección del objetivo;
-
posibilidad de apuntar de forma individual;
-
libertad de neutralizar a la artillería antiaérea a su propio juicio.
El “circulo”
garantiza que la artillería antiaérea enemiga esté constantemente
atacada por los IL-2. Esto no permite al personal de los antiaéreos
abrir el fuego para evitar ser eliminados por los Shturmovik.
2) El
“circulo” permite emprender de forma agresiva y eficiente las acciones
defensivas contra los cazas enemigos.