¹ 59. El ataque
consiste en actuar sobre el enemigo empleando el armamento. Todas
las acciones anteriores, emprendidas por un piloto de caza, deben
ser realizadas en beneficio del uso del armamento.
¹ 60. El
esfuerzo de un piloto de caza debe ser dirigido en poder acercarse
al enemigo hasta una distancia de fuego eficaz y ocupar una posición
tal que le permita disparar con precisión y derribar al enemigo de
manera inmediata.
¹ 61. Si el
atacado se dio cuenta de la amenaza del ataque demasiado tarde, esto
significa que le dio la oportunidad a su enemigo para efectuar el
ataque por sorpresa. En este escenario, el objetivo primordial del
atacado será frustrar el ataque, realizando una maniobra que le
permita impedir que el atacante dispare con precisión y rechazar su
ataque con un contraataque.
Para un bombardero atacado las acciones
emprendidas consistirán en realizar una maniobra para frustrar el
ataque enemigo y disparar con el armamento defensivo contra el avión
atacante.
Para un caza atacado las acciones emprendidas
consistirán en realizar una maniobra tal que le permita impedir al
enemigo disparar con precisión y en emplear su armamento para
realizar un contraataque.
¹ 62. El ataque
aéreo esta compuesto por las fases siguientes:
-
Entrada a la posición de fuego;
-
Posición de fuego;
-
Salida del ataque
(Ver Fig. ¹5)
Fig. ¹ 5.
Fases de un ataque, realizado por un caza monoplaza

El orden de estas fases de ataque en cualquier
caso siempre será constante, pero su duración puede variar en
función de las condiciones en las que nos encontramos.
¹ 63. El tiempo
de entrada a la posición de fuego puede variar en función de la
dirección del ataque y de la posición relativa, uno respecto del
otro, de ambos adversarios. Si el rumbo de vuelo del avión atacante
es similar a su rumbo de ataque, la entrada a la posición de fuego
será ejecutada en el menor tiempo posible y con pocas variaciones de
rumbo. Cuanto más grande sea el ángulo de giro necesario para
apuntar al objetivo, más elevado será el intervalo del tiempo
necesario para entrar a la posición de fuego. Para lograr una mayor
precisión de entrada a la posición de fuego, hay que considerar y
aprovechar la posición del avión (te puedes colocar más alto o más
bajo respecto al enemigo), la distancia entre ambos aviones, la
velocidad tuya y la velocidad del enemigo.
¹ 64. La
posición de fuego es el punto culminante de un ataque, dado que es
el momento cuando se decide el resultado del mismo. Si el enemigo no
hizo nada para impedir el ataque hasta el momento de tu entrada a la
posición de fuego, esto significa que será atacado por sorpresa.
¹ 65. El tiempo
de permanencia en la posición de fuego depende de la dirección del
ataque (atacando en rumbo similar al avión atacado, a escorzos
reducidos y con pequeño diferencial de velocidades este tiempo será
el máximo).
La posición de fuego de un bombardero atacado
es mucho mayor que la posición de fuego del caza atacante, dado que
el bombardero tiene ametralladoras móviles y puede seguir disparando
cuando el caza deja de disparar y se encuentra muy cerca del
bombardero en el momento de su salida del ataque y sin apuntar con
su armamento contra el bombardero.
(Ver Fig. ¹ 6).
Fig. ¹ 6. Tiempo de permanencia en la posición de
fuego del caza atacante y del bombardero atacado

Esta ventaja que tiene el bombardero obliga al
caza atacante a implicar todo su esfuerzo en eliminar al bombardero
en el transcurso del primer ataque, disminuyendo de esta forma la
posición de fuego del bombardero y reduciendo al mínimo su fuego de
oposición.
Un ataque realizado por sorpresa y la
eliminación del enemigo en el primer ataque da la posibilidad de
excluir completamente el fuego de oposición del bombardero atacado.
¹ 66. Las
acciones de un piloto de caza en la posición de fuego son:
-
apuntar en bruto;
-
apuntar en fino;
-
abrir fuego.
(Ver Fig. ¹ 7).
Fig. ¹ 7. Acciones de un piloto en la posición de
fuego

¹ 67. Apuntar
en bruto significa dirigir el armamento del caza hacia el objetivo.
En esta fase, el piloto aun no puede abrir fuego, porque tras
finalizar la maniobra de entrada a la posición de fuego, el avión
sigue moviéndose por inercia en dirección de la maniobra.
¹ 68. Apuntar
en fino significa colocar el armamento en las dimensiones vertical y
horizontal necesarias para acertar en el objetivo. Para encontrar el
punto donde hay que apuntar, el piloto debe determinar la velocidad
de vuelo del enemigo, el escorzo y la distancia que separa a ambos.
¹ 69. Abrir
fuego es la etapa más decisiva e importante en la posición de fuego.
Una vez colocado en la posición de fuego, el piloto debe emplear
todos sus esfuerzos a toda costa en eliminar al enemigo. En cuanto
al nivel de pilotaje y de tiro, la preparación del piloto debe estar
enfocada en conseguir que el piloto, estando en la posición de fuego,
se mantenga tranquilo, seguro y firme.
La calidad de la posición de fuego depende en
gran medida del nivel de preparación del piloto en cuanto a tiro
aéreo (Ver Fig. ¹ 8).
Fig.8. Calidad de la posición de fuego de un piloto
de caza

¹ 70. La salida
del ataque es efectuada cuando:
-
seguir disparando no tiene sentido;
-
el caza atacante acaba en una posición de desventaja;
-
existe un peligro de colisión.
La tarea del caza consiste en salir de la zona
de fuego del avión enemigo cuanto antes, realizando una maniobra que
le permita ocupar de nuevo un posición de ataque en el tiempo más
breve posible.
Si el enemigo es derribado, el ataque finaliza.
¹ 71. Las
elevadas velocidades de vuelo de los cazas modernos reducen
considerablemente el tiempo del ataque cuando éste se realiza desde
la semiesfera delantera o en lateral, e incrementan de forma
considerable las velocidades angulares de un caza respecto el avión
atacado, lo que dificulta sensiblemente la puntería y en general
reduce la calidad del tiro aéreo.
La duración de un ataque puede ser incrementada
gracias al aumento de la distancia de tiro, pero en este caso la
probabilidad de impacto disminuye.
¹ 72.
Manteniendo en todo momento el avión enemigo en el colimador y
cuando éste vuela en línea recta y a una velocidad constante, y
además cuando se le ataca a la misma altitud entrando por detrás y
por el flanco, las distancias de tiro, las deflexiones en milésimas
y las velocidades angulares relativas del caza respecto objetivo van
a variar (si el enemigo vuela a 140 m/seg., y el caza atacante vuela
a 170 m/seg.) tal y como se indica en la tabla a continuación:
Tiempo desde
el comienzo del ataque, en segundos |
Distancia de
fuego, en metros |
Deflexion, en
milesimas |
Velocidad
angular relativa |
0 |
500 |
140 |
15º 20´ |
1 |
412 |
110 |
15º 20´ |
2 |
352 |
78 |
14º |
3 |
311 |
49 |
10º 40´ |
4,5 |
260 |
16 |
8º 15´ |
5,5 |
230 |
7 |
3º 30´ |
Cuado el ataque se efectúa por delante y por el
flanco, a la misma altitud y a las mismas velocidades, las
distancias de tiro, las deflexiones en milésimas y las velocidades
angulares relativas del caza respecto al objetivo van a variar tal y
como se indica en la tabla a continuación:
Tiempo desde
el comienzo del ataque, en segundos |
Distancia de
fuego, en metros |
Deflexion, en
milesimas |
Velocidad
angular relativa |
0 |
500 |
140 |
15º |
1 |
280 |
153 |
28º |
2 |
134 |
118 |
52º 20´ |
3 |
86 |
27 |
28º 40´ |
3,5 |
71 |
7 |
11º 20´ |
Teniendo en cuenta que un piloto de caza bien
preparado es capaz de mantener el objetivo en su colimador a una
velocidad angular que no supera 10º por segundo, los cálculos
anteriores demuestran que el ataque puede tener éxito solo si se
realiza cuando ambos adversarios vuelan en rumbos similares.
A la hora de elegir la distancia de abrir el
fuego, hay que tomar en consideración la probabilidad de impacto y
la velocidad angular relativa, con la cual el piloto atacante es
capaz de mantener el objetivo en el punto de referencia de tiro.
¹ 73. En un
combate aéreo hay que prestar especial importancia al régimen de
tiro. Debido a que los cazas modernos tienen la munición limitada,
el piloto debe gastar la munición cuidadosamente para no quedar sin
munición en un momento crucial del combate.
El ahorro de la munición debe ser combinado con
la necesidad de apuntar de manera más rigurosa, que garantiza la
total seguridad de abatir al enemigo. Además, el piloto siempre debe
dejar un 20% de munición como reserva para hacer frente al enemigo
en un posible encuentro con él durante la vuelta a base.
¹ 74. La
principal medida de ahorro de la munición es la limitación de la
duración de las ráfagas, manteniendo apretados los gatillos justo lo
necesario. La duración necesaria de la ráfaga depende de la
distancia de tiro y del desplazamiento angular del objetivo, y se
divide en tres tipos:
-
ráfaga corta;
-
ráfaga media;
-
ráfaga larga.
La ráfaga corta
tiene una duración de 0.5 seg., y se emplea solamente cuando hay que
disparar a grandes distancias (más de 300m.) y a la hora de disparar
a elevadas velocidades angulares relativas del enemigo (más de 10º
por seg.).
La ráfaga media
tiene una duración de hasta 1 seg., y se emplea cuando hay
posibilidad de apuntar con precisión y a la hora de disparar a
reducidas velocidades angulares relativas del enemigo (no más de 10º
por seg.), es decir, cuando es posible mantener al enemigo en el
colimador en todo momento.
La ráfaga larga
tiene una duración de hasta 2 seg., y se emplea a la hora de
disparar a velocidades angulares relativas del enemigo muy reducidas
(2-3º por seg.) y a distancias cortas (no más de 75-25m), cuando
existe la posibilidad de seguir disparando hasta eliminar el avión
enemigo por completo.
¹ 75. El tiro
tiene éxito solamente cuando se apunta con el colimador desde
principio.
Justo después de abrir fuego, hay que trasladar
la atención sobre las trazadoras, mirando a través del reflector del
colimador.
¹ 76. La
corrección de tiro por trazadoras exige grandes habilidades y mucho
entrenamiento del piloto. Observando las trazadoras, el piloto debe
seguir apuntando en todo momento. Observando la posición de las
trazadoras respecto al objetivo, el piloto debe ajustar la ráfaga
dirigiendo suavemente su avión para que las ráfagas impacten en el
objetivo.
-
Si la trazadora se acerca al objetivo, hay que corregir el
tiro;
-
Si la trazadora se aleja del objetivo, hay que dejar de
disparar y volver a apuntar.
El único síntoma que demuestra el impacto con
toda la seguridad, es cuando la trazadora se corta en el objetivo.
En ocasiones, como síntoma secundario puede servir el incremento del
brillo de la trazadora sobre el fondo del objetivo. Dicho lo
anterior, en un combate aéreo la trazadora resulta ser un medio
auxiliar para apuntar. |