USO EN COMBATE
Como demuestran las pruebas en el polígono de
tiro, si la PTAB-2.5-1.5 se lanzaba desde 200m de altitud y en vuelo
horizontal a unos 340-360 km/h, una bomba impactaba en un área media
de 15m2. Dependiendo de la cantidad de bombas que cargaba
un avión, el área total cubierta por las bombas estaba formada por
una banda de 15x(190-210)m, lo que a efectos prácticos garantizaba
un impacto asegurado en cualquier modelo de carro de combate o
vehiculo enemigo. Y si tomamos en consideración que un carro de
combate puede ocupar un área de unos 20-22m2, el impacto
de una sola bomba era suficiente para dejarlo fuera de servicio al menos
por un tiempo (en una gran cantidad de casos de forma permanente).
Si las PTAB-2.5-1.5 se lanzaban desde una
altitud de 75-100m, la bomba impactaba prácticamente en cualquier
carro de combate que se encontraba en una banda de 15x70m.
Por tanto, la PTAB era un arma anticarro
bastante eficaz para aquellos tiempos. No en vano el creador de esta
bomba, el ingeniero I.A. Lariónov, en enero de 1944 fue condecorado
con la Orden de Lenin, y en 1946 fue galardonado con el Premio
Estatal de la URSS.
A pesar de haberse logrado ciertos avances en
el uso de los cañones como arma anticarro, a partir de 1943 el medio
básico anticarro era la PTAB.
El impacto de la bomba provocaba la detonación
de la munición, incendiaba el combustible o sus vapores.
Se considera que la altitud mínima de
lanzamiento de la bomba que puede garantizar su estabilización para
que impacte a un ángulo adecuado y que explote era de 70m.
Las PTAB se emplearon por primera vez durante
la Batalla de Kursk, el 5 de junio de 1943. Los (probablemente)
primeros en usar la bomba fueron los pilotos de la 2ª GShAD y 299ª
ShAD del 16º VA (Ejército del Aire), atacando a los carros enemigos
en la zona de Maloarjángelsk, Yásnaya Polyána.
El uso masivo de las PTAB causó un efecto
estremecedor al enemigo. Los carristas, tanto alemanes como
soviéticos, al tercer año de la guerra ya se habían acostumbrado a
la eficiencia relativamente baja de la aviación sobre los carros de
combate. Por tanto, durante primera temporada los alemanes no
emprendían ninguna acción para evitar ataques de la aviación
soviética, como por ejemplo la separación de las formaciones de
combate y de las columnas en marcha, dispersión en las zonas de
concentración de carros (lugares de repostaje de
combustible
o en posiciones
iniciales antes de iniciar un ataque, zonas por donde se cruzaban
los ríos, etc.), por lo que fueron duramente castigados: la banda de
dispersión de las PTAB cubría a 2-3 carros de combate que se
encontraban uno de otro a 60-75m, con lo que sufrieron notables
bajas incluso cuando los IL-2 no se empleaban de forma masiva.
Por ejemplo, solamente los pilotos de la 291
ShAD al mando del Coronel A.N. Vitruk, usando estas bombas,
el 5 de julio eliminaron y dejaron fuera de servicio hasta 30 carros
de combate enemigos {1}.
Referente a este ataque, el jefe del Estado Mayor de VVS General
Coronel S.A. Judyakov envió el informe a nombre del Comandante de
VVS, Mariscal A.A. Nóvikov: “… los pilotos del Coronel Vitruk estan
fascinados con los resultados logrados con estas bombas” {301}.
En todos los casos las tripulaciones informaban de que a causa de
los impactos directos de las PTAB los carros y vehículos se
incendian, y cuando se realiza el segundo ataque, los carros que
quedan operativos se
retiran de carretera y se dispersan.
Los pilotos de IL-2 del 3er y 9º SAK
(Cuerpo Aéreo Mixto) del 17º VA (Ejercito del Aire) al final del 6
de julio destruyeron y dañaron con las PTAB hasta 90 carros de
combate y vehículos blindados enemigos sobre el campo de batalla y
en las zonas por donde se cruzaba el río Severniy Donets {1}.
En la dirección de Oboyan, el 7 de julio los
IL-2 del 1er ShAK (Cuerpo Aéreo de Asalto) del 2º VA,
prestando apoyo al 3er Cuerpo Mecanizado del 1er
Ejercito Acorazado, entre las 04:40 y 06:40 de la mañana en dos
grupos de 46 y 33 aviones respectivamente y apoyados por 66 cazas
efectuaron ataques concentrados sobre concentración de carros de
combate en sus posiciones iniciales de ataque en la zona de
Syrtsevo-Yakovlevo (unos 300-350 carros estaban preparados para
efectuar un ataque en dirección a Krasnaya Dubrava) y Bolshie
Mayachki (hasta 100 carros) {1}.
El ataque del 1er ShAK y las activas
actuaciones del 3er Cuerpo Mecanizado tuvieron éxito: los
alemanes no lograron romper la segunda línea defensiva en el centro
del 1er Ejercito Acorazado. Cuando fueron reveladas las
fotografías tomadas (a las 13:15) por el avión de fotocontrol, en el
campo de batalla se descubrió más de 200 carros de combate y cañones
autopropulsados enemigos dañados y destruidos {1}.
Según los datos alemanes, la 3ª División
Acorazada de SS “Calavera Muerta” (Totenkopf)
en la zona de Bolshie Mayachki a lo largo del día sufrió varios
ataques masivos por parte de los IL-2 del 2º VA (Ejercito del Aire),
perdiendo en total a 270 carros de combate, cañones autopropulsados
y vehículos blindados. La densidad de impactos de las PTAB era tal
que fueron registrados más de 2.000 impactos directos de las
PTAB-2.5-1.5. {1}
Tras sufrir el primer "shock", los alemanes
pasaron a formaciones dispersas. Por consiguiente, este hecho les
dificultó notablemente la dirección de las formaciones de los carros
de combate, incrementó su periodo de despliegue, de concentración y
de reemplazo y dificultó la interacción entre sus unidades. Por
consiguiente, la eficacia de las PTAB se había reducido en unos
4-4.5 veces, aun así permaneciendo unas 2-3 veces mas eficaz en
comparación con el uso de las bombas de fragmentación
(AO)
y de propósito
general (FAB).
Debido a esto, en las unidades operativas de
VVS KA se habían adoptado dos versiones de carga bélica de los IL-2,
cuando éstos actuaban sobre carros de combate. Cuando el ataque era
efectuado sobre grandes agrupaciones de carros, los IL-2 eran
cargados a tope con las PTAB-2.5-1.5, y cuando se atacaba a los
carros de combate que prestaban apoyo a la infantería en el campo de
batalla (es decir, en formaciones de combate dispersas), los IL-2 se
cargaban de siguiente forma: 50% de la carga bélica correspondía a
las PTAB, y el restante 50% a las FAB-50 o FAB-100.
Cuando los carros de combate estaban
concentrados en gran cantidad y en un área relativamente pequeña,
cada piloto apuntaba al carro que estaba en medio. A la hora de
entrar en picado se apuntaba tomando un punto de referencia lateral,
entrando en ataque efectuando un giro a 25-30º. Las PTAB eran
lanzadas en el momento de salir del picado a 200-400m de altitud
usando dos cassettes (contenedores KMB) en cada pasada, con la
intención de cubrir todo el grupo de carros de combate. En caso de
haber nubosidad baja, el lanzamiento se efectuaba a 100-150m de
altitud en vuelo horizontal y a velocidad incrementada.
Cuando los carros estaban dispersados sobre un
área grande, los pilotos de IL-2 apuntaban a los carros puntuales.
En este caso la altitud de lanzamiento de las PTAB-2.5-1.5 durante
la salida del picado era algo inferior, unos 150-200m, y en cada
pasada se gastaba solamente uno de los cassettes.
La experiencia bélica demuestra que para
destruir cada 10-20 carros de combate (en términos medios) era
necesario asignar unos 3-5 grupos de los IL-2 (6 aviones en cada
grupo), los cuales debían actuar en secuencia, uno tras otro, o de
dos en dos.
Aparte de las PTAB-2.5-1.5 y bombas de
propósito general FAB-50 y FAB-100 en aquel entonces los IL-2 contra
carros de combate usaban ampliamente las capsulas incendiarias
AZh-2, las cuales demostraron ser eficientes contra cualquier tipo
de carros de combate.
Solamente el 16º VA (Ejercito del Aire) entre
el 5 y 10 de julio lanzó aproximadamente 4.000 capsulas AZh-2. Fue
lanzada aproximadamente la misma cantidad de bombas de propósito
general. Estas cifras son importantes, pero nada comparables con la
intensidad de uso de las PTAB: durante este mismo periodo solamente
los pilotos del 16º VA lanzaron sobre el enemigo 23.315 bombas PTAB
{2}.
Los IL-2, contra los carros de combate, junto a
los cohetes perforantes RBS-132, usaron ampliamente los cohetes
ROFS-132, los cuales tenían una mejor puntería (menor dispersión)
que los RBS-132 o RS-132.
Pueden ver los resultados de estos ataques
aqui.
El ROFS-132 con un impacto directo perforaba el
blindaje de los carros medios y pesados.
Si el ROFS-132 explotaba a 1 metro del carro de
combate y a un ángulo de 30º, la energía cinética de sus fragmentos
era suficiente para perforar el blindaje alemán con un grosor de
hasta 15mm. Explotando a un ángulo de 60º y a 3m del carro, se
conseguía perforar con sus fragmentos el blindaje de 40mm. En este
caso los impactos de los fragmentos perforaban orificios de
(20-25)x(35-80)mm, como una cifra media.
Con un impacto directo del ROFS-132, por
ejemplo en un cañón de asalto StuG IV (o en la parte lateral del
cazacarros Jgd Pz IV/70), se conseguía perforar el blindaje de 30mm;
su cañón, los sistemas y tripulación dentro del carro, por norma
general, quedaban fuera de combate.
Si el ROFS-132 impactaba en el motor del Pz.
IV, el carro quedaba destruido por completo.
No vamos a entrar en detalle sobre el uso de
estas municiones debido a que esto esta fuera de alcance de este
artículo (tal vez en un futuro volveremos a este tema), y seguiremos
hablando sobre la PTAB-2.5-1.5.
Fueron eficaces los ataques en la zona de
Buzuluk y Semenovka, efectuados por los octetos liderados por St.
Leytenant Smirnov y Capitán K.E. Strashniy, ambos del 874º ShAP.
Cuando éstos volvieron a la base, recibieron una nota de
agradecimiento por parte del mando del 13º Ejército {4}.
“A pesar de que el enemigo comenzó a
dispersar sus carros de combate en grandes áreas con intervalos y
distancias de 60-75m, las tropas de tierra detectaron a 14 carros de
combate incendiados y 30 dañados. Los IL-2 atacaron en planeo,
aproximándose al campo de batalla a 1100m de altitud. Lanzaron
bombas (en total 792 PTAB-2.5-1.5) a unos 500-600m. Posteriormente
hemos determinado que el impacto directo de una PTAB-2.5-1.5 en un
carro de combate o un cañón autopropulsado lo elimina o lo deja
fuera de servicio, provocando un incendio y/o explosión de la
munición que transporta”, constaba
en este informe {183}, {4}.
Las tripulaciones de este mismo regimiento
destacaron contra carros de combate en la zona de Maloarjángelsk,
usando aproximadamente 500 bombas.
La gran cantidad de bombas, lanzadas por cada
uno de los IL-2 en un periodo de tiempo muy breve fue especialmente
eficaz a la hora de atacar a los objetivos blindados en los lugares
de su concentración, zonas de repostaje, en posiciones iniciales de
ataque, en los cruces de los ríos. En los documentos de los archivos
queda patente la alta valoración de los ataques de IL-2 por parte de
los mandos terrestres. Por ejemplo, el estado mayor del 2º Ejercito
Acorazado envió un telegrama de agradecimiento al comandante del 16º
VA (Ejercito del Aire), en el cual consta: “A lo largo del día 10
de julio de 1943 la aviación (soviética) realizó un ataque
masivo sobre la concentración de carros de combate e infantería
enemiga al norte de Ponyri ¹1 y la elevación ¹238.1. Nuestros
carristas están fascinados con el trabajo de los “Halcones de
Stalin”, y os envían grandes agradecimientos de su parte. Estamos
convencidos de que nuestra hermandad militar fortalecerá aun mas
nuestros ataques conjuntos y hará llegar mas pronto nuestra victoria
definitiva. Recordémosle al enemigo una vez mas el
STALINGRADO” {184}, {4}.
Mas adelante una comisión especial efectuó una
investigación en la zona anteriormente indicada. Fue determinado que
“de los 44 carros de combate eliminados y dañados (por la
aviación soviética) solamente 5 de ellos fueron victimas de los
bombarderos (como resultado de un impacto directo de una FAB-100
o FAB-250), el resto fueron victimas de los IL-2. Tras haber
analizado estos carros de combate y los cañones autopropulsados, se
pudo establecer que las PTAB causan a un carro de combate tales
daños que son imposibles de reparar. Debido al incendio se destruyen
todos los sistemas del carro, el blindaje a causa del incendio
pierde sus cualidades (resistencia), y una detonación de la
munición del carro acaba con el por completo…”{185}, {4}.
Según los informes de los estados mayores de los ejércitos
acorazados Nr2 y Nr13, "en los ataques aéreos masivos, efectuados el
día 10 de julio por los aviones del 16 Ejercito del Aire, al norte
de Ponyri, Ponyri-1 y la elevación Nr 238.1, así como en la zona de
Kashara, al norte de Kutyrka, elevación Nr 257.0, por la aviación
soviética fueron quemados y dañados 48 carros de combate enemigos.
En elemigo se vió obligado a abortar sus ataques, y a retirar el
resto de sus fuerzas al norte de Kashara"
{301}.
Según los documentos del Estado Mayor del 16 Ejercito del Aire, en
las zonas indicadas 5 carros fueron destruidos por los bombarderos
del 3er BAK, y los 39 restantes eliminados por los IL-2 de la 2
GShAD y la 299 ShAD, "ya que sobre concentraciones de carros
solamente se usaron las PTAB" {301}.
Para ser justos, hemos de mencionar también que en estos ataques los
IL-2, aparte de las PTAB, usaron ampliamente las capsulas
incendiarias AZh-2, las cuales no solamente mostraron excelentes
resultados sobre carros de combate y vehículos de transporte, sino
también sobre baterías de artillería antiaérea.
El análisis de los blindados destruidos y dañados demuestra que tras
el impacto de una PTAB, en la mayoría de los casos el carro no puede
ser reparado. "Como resultado del incendio, se destruyen todos los
sistemas, la coraza "se quema" y pierde su resistencia. La explosión
de la munición termina de destruir completamente el carro"
{301}.
Teniendo en cuenta que los IL-2 actuaban sobre los carros de
combate, que se encontraban principalmente en las zonas de
concentración para comenzar el ataque, en zonas de carga de
combustible, en marcha para reagrupación o en los accesos desde la
retaguardia, entonces la evacuación de los carros dañados o
destruidos no representaba ninguna dificultad. Por eso la comisión,
encargada del análisis de la eficacia de las PTAB llegó a la
siguiente conclusión: "a efectos prácticos, la cantidad de carros y
cañones autopropulsados destruidos por las PTAB, en realidad debe
ser mucho mayor"{301}.
La alta eficacia de la PTAB en la lucha contra carros de combate fue
confirmada de forma inesperada también por otra vía: en la zona por
donde avanzaba la 380 SD del Frente de Bryansk, en la zona de la
aldea Podmaslovo, una compañía militar soviética cayó por error bajo
el ataque de los IL-2. Como resultado, un T-34 a causa del impacto
directo de la PTAB fue totalmente destruido: "se desintegró en
varias partes". La comisión que trabajaba en el lugar del ataque
registró "alrededor del tanque 7 cráteres y varios
“bigotes” de alambre" (los
cuales bloqueaban las palas del “molinillo” de la bomba){301}.
Todos estos informes del Ejercito permitieron llegar a la conclusión
final: "El lanzamiento de las PTAB solventó la principal causa de la
baja eficacia de la aviación cuando contra carros de combate se
utilizan bombas de propósito general o bombas de fragmentación: la
baja probabilidad del impacto en un área dado del carro".
"Hay que fabricar estas bombas de forma masiva y usarlas de manera
más amplia posible durante los ataques a las tropas mecanizadas, a
los convoyes ferroviarios, a los lugares por donde se cruzan los
ríos, a las posiciones de artillería, y otros objetivos similares;
todos estos objetivos se destruyen con éxito mediante las PTAB", -
informaba el Jefe de la Dirección Operativa del Estado Mayor de VVS
General Zhuravlióv.
Como habíamos mencionado anteriormente, el
mando soviético fabricó y envió a los almacenes de las unidades
aéreas una gran cantidad de las bombas PTAB-2.5-1.5, pero prohibió
categóricamente su empleo hasta recibir una orden especial de
Stavka, con lo que se lograba el factor sorpresa. Como podemos ver,
ha funcionado.
Uno de los primeros (probablemente los
primeros) en usar las PTAB fueron los pilotos del 617º ShAP de la
291ª ShAD, el día 5 de julio, temprano por la mañana. En la zona de
Bútovo, el grupo de los IL-2, liderados por St. Leytenant Dobkevich,
atacó por sorpresa a una columna enemiga. Saliendo del ataque, las
tripulaciones de los IL-2 vieron con claridad a una gran cantidad de
carros de combate y vehículos de transporte envueltos en llamas.
Durante la retirada del objetivo el grupo rechazó el ataque de los
Messerschmitt, uno de los cuales fue derribado en la zona de
Sujo-Solotino, cuyo piloto fue hecho prisionero. El mando de la
agrupación aérea tomó la decisión de aprovechar el éxito logrado
durante este ataque y seguidamente (tras finalizar el ataque del 61º
ShAP) envió a los grupos del 241º y 617º ShAP, impidiendo al enemigo
ponerse en formación de combate. Según los informes de las
tripulaciones, éstas lograron destruir hasta 15 carros de combate
enemigos. Además, fueron eliminados 6 vehículos. En total fueron
usadas 1.248 bombas PTAB, 8 AO-28, 28 RS-82 y 890 proyectiles para
cañones Vya-23{285}, {4}.
El mismo día las PTAB fueron empleadas por pilotos de la 266 ShAD
del 1er Cuerpo de Asalto. El grupo formado por 10 IL-2 del 673 ShAP
atacó a los carros de combate enemigos, parados en la zona de
Yákovlevo - Pogorélovo. En el ataque resultaron destruidos y dañados
10 carros y 10 vehículos de transporte, y se observó una gran
explosión. Además de las bombas de propósito general y de
fragmentación, fueron lanzadas 491 PTAB {301}.
El uso de las nuevas bombas enseguida llamó
atención a los mandos del Frente de Voronezh. Por ejemplo, en su
informe nocturno a Stalin, el General Vatutin destacó: “Ocho IL-2
bombardearon una concentración de carros de combate, usando las
nuevas bombas. La eficacia de estas bombas fue buena: 12 carros de
combate se incendiaron enseguida”{286}, {4}.
Una valoración de las bombas PTAB igual de
positiva se refleja también en los documentos del 2º VA (Ejercito
del Aire). Allí consta: “El personal de vuelo de la aviación de
asalto, acostumbrado a atacar a los carros de combate con las bombas
existentes hasta ahora, está fascinado con las PTAB; cada misión de
combate, en la cual se usan las PTAB, resulta ser muy eficaz, y en
cada misión el enemigo pierde a varios carros, incendiados o dañados”{287},
{4}.
Los soldados y oficiales de las divisiones
enemigas que estaban implicadas en el avance, notaron enseguida la
fuerza de los ataques perpetrados por la aviación soviética. Por
ejemplo, uno de los oficiales de los carros de combate alemanes,
hecho prisionero por los soviéticos, durante el interrogatorio hizo
constar:
“El día 6 de julio, a las 5 de la mañana, en
la zona de Belgorod nuestro grupo de carros de combate, formado por
lo menos por 100 unidades, fue atacado por los IL-2 rusos. El efecto
causado por este ataque fue nunca visto hasta ahora. Justo durante
la primera pasada uno de los grupos de IL-2 incendió y destruyó a
unos 20 carros. Al mismo tiempo un segundo grupo de los IL-2 atacó a
un batallón de infantería motorizada, cuyo personal estaba sobre sus
vehículos. Sobre nuestras cabezas cayó una lluvia de bombas de
pequeño calibre y de proyectiles. Fueron incendiados 90 vehículos y
muertos 120 soldados y oficiales. En toda la guerra en el Frente del
Este jamás había visto una acción similar de la aviación soviética.
Me faltan palabras para describir toda la brutalidad de aquel ataque”
{288}, {4}.
Es probable que éste fue el ataque de los IL-2
del 61º ShAP, la 291ª ShAD (2º VA) a una columna de carros de
combate y de vehículos (por lo menos 400 unidades en total), la cual
el día 7 de julio se dirigía por la carretera de Tomarovka –
Cherkasskoe. Aquel día, primero un octeto de IL-2, liderado por el
St. Leytenant Baranov, atacó desde 200-300m de altitud, realizando
dos pasadas y lanzando 1.600 bombas anticarro. Posteriormente el
ataque fue repetido por el segundo octeto de IL-2, liderados por el
Ml. Leytenant Gólubev. Durante la retirada, las tripulaciones
detectaron unos 20 carros de combate en llamas {289}, {4}.
Según las memorias de S.I. Chernyshev, el cual
recordaba aquel 7 de julio y que en aquel entonces era comandante de
grupo de la 183ª SD (División Mixta, fuerzas de tierra), formando
parte del segundo escalón defensivo del Frente de Voronezh:
“Una columna de carros de combate,
encabezada por los “Tigres”, avanzaba lentamente en dirección a
nuestro territorio, disparando con sus cañones. Veíamos sus
proyectiles volando que sonaban en el aire. Me puse algo nervioso:
había demasiados carros enemigos. Me venían dudas en la cabeza:
¿podremos aguantar este avance? Pero de repente aparecieron nuestros
IL-2. Suspiramos todos con alivio. Los IL-2 volando a baja altura se
lanzaron al ataque. Enseguida se incendiaron 5 carros que
encabezaban la formación. Los IL-2 realizaban una pasada tras otra.
El campo de batalla se cubrió de columnas de humo negro. Por primera
vez tuve la oportunidad de presenciar estando tan cerca la
extraordinaria maestría de nuestros pilotos” {290}, {4}.
Según los informes operativos del 2º VA
(Ejercito del Aire), a lo largo del 7 de julio durante los ataques
contra los carros y vehículos enemigos solamente la 291 ShAD lanzó
10.272 bombas PTAB, y al día siguiente, otras 9.727 bombas.
Las PTAB comenzaron a ser usadas también por
los pilotos del 1er ShAK, los cuales, a diferencia de sus colegas,
efectuaron ataques en grandes grupos, formados por 40 o más IL-2.
Según los informes de las tropas terrestres, el 7 de julio se
produjo un ataque de 80 IL-2 pertenecientes al Cuerpo de V.G.
Ryazanov. Este ataque, efectuado en la zona de Yakovlevo-Syrtsevo,
ayudó a rechazar el ataque de cuatro divisiones acorazadas, las
cuales intentaron explotar el éxito de su ofensiva en dirección a
Krasnaya Dubrovka, Bolshie Mayachki.
Los numerosos informes de pilotos sobre una gran cantidad de carros
destruidos, como es lógico, levantaron sospechas entre los mandos
superiores de VVS. Por esto, para controlar los resultados de
ataques en las misiones de combate fueron introducidos
controladores, los cuales eran oficiales de estados mayores de las
divisiones y también fueron enviados personalmente los comandantes
de regimientos. Por otro lado, a las unidades terrestres se enviaron
grupos especiales de controladores con el objetivo de verificar la
eficacia real de los ataques de los IL-2; estos controladores provenían
de los estados mayores de los Ejércitos del Aire
{301}.
Por ejemplo, el 7 de julio el segundo comandante de la 299 ShAD
encargado del servicio de tiro aéreo, ingeniero militar de II rango
Sherbina fue incluido en el grupo de ataque, formado por 7 IL-2 del
217 ShAP (líder fue St. Leytenant Ryzhkóv) para controlar los
resultados del bombardeo sobre los carros enemigos en la elevación
Nr 255.0, a 1km al norte de Ponyri. En esta zona fueron detectados
hasta 35 carros de combate, los cuales fueron enterrados en tierra
(medida defensiva) y otros 15 estaban en movimiento. Los IL-2
entraron en ataque desde 800-900m de altitud en planeo a un ángulo
de 20-25 grados. La carga bélica de dos aviones era PTAB, el resto
(cinco) cargados con FAB-50. Los IL-2 hicieron dos entradas al
objetivo. Las PTAB cubrieron a los carros, tres de los cuales se
incendiaron: las tripulaciones vieron con total seguridad los focos
de incendio y columnas de humo negro{301}.
Los carros enemigos seguían siendo el objetivo
prioritario para los IL-2 durante toda la fase de operación
defensiva de la Batalla de Kursk. No seria de extrañar que el 8 de
julio el estado mayor del 2º VA (Ejercito del Aire)
también decidió
averiguar la alta eficacia de las nuevas bombas cumulativas. Fue
formada una comisión especial compuesta por los oficiales del Estado
Mayor del Ejército, los cuales observaban las acciones de las
unidades de los IL-2 del 617º ShAP (liderado por el comandante del
regimiento Mayor Lomovtsev). Lomovtsev lideró este mismo día
un grupo de 6 IL-2 para efectuar ataque sobre una concentración de
carros de combate en la zona de Pokrovka, Yakovlevo,
Kozmo-Demianovka. Durante la primera pasada el sexteto de
los IL-2 desde 800-600m de altitud lanzó las bombas PTAB sobre la
concentración de carros de combate enemigos. En el segundo ataque
los IL-2 dispararon una salva de cohetes RS y descendiendo
posteriormente hasta 200-150m dispararon con cañones y
ametralladoras. Los oficiales de la comisión detectaron 4 fuertes
explosiones y unos 15 carros de combate incendiados {291}, {4}.
Los vuelos de control de los mandos responsables y los envíos de
oficiales de los estados mayores a la primera línea del frente con
el objetivo de averiguar la eficacia real de las PTAB permitieron a
los mandos de los de los Ejércitos del Aire llegar a la conclusión
de que "las cifras de las bajas enemigas, las cuales constan en los
informes de los pilotos, son correctas"
{301}.
Los pilotos de IL-2 del 1º Ejercito del Aire el
día 7 de julio, entre las 15:40 y 17:15 efectuaron tres ataques
concentrados (en cada uno participaron de 20 a 30 IL-2), frustrando
la ofensiva de unos 200 carros de combate e infantería motorizada en
la zona de la elevación ¹257.0, Kashara (posiciones del 16º Cuerpo
Acorazado del 2º Ejercito Acorazado). Según los informes de las
tripulaciones, en el campo de batalla fueron incendiados 34 carros
de combate enemigos {2}.
Según los datos alemanes, la 9ª División
Acorazada alemana en la zona de la elevación ¹257.0, Kashara, el día
7 de julio perdió 70 carros a causa de las acciones de la aviación
soviética {2}.
Como resultado, los alemanes fueron obligados a
abortar los ataques y retirar las tropas que les quedaban al norte
de Kashara.
El día 9 de julio la 5ª GShAD (División aérea
de Asalto de la Guardia) del 17º VA a lo largo del día literalmente
despedazó a la columna motorizada en la zona de Maslova Pristan,
eliminando y dañando hasta 47 piezas acorazadas y hasta 147
vehículos de transporte {2}.
En el informe de la Dirección Operativa del
Estado Mayor de VVS KA del 12.07.43, en el cual se informaba sobre
la eficiencia del empleo de las PTAB-2.5-1.5, consta: “...
En el mensaje secreto enviado el dia 11.07.43 por parte del camarada
General-Coronel Vorozhéykin a nombre del camarada STALIN se informa,
que según las observaciones de las tropas de tierra, en la
zona de la elevación ¹255.1 un grupo de 6 IL-2 atacó a 15 carros de
combate “Tigre”, 6 de los cuales se incendiaron. 5 de julio un grupo
de 8 IL-2 incendió con las bombas PTAB-2.5-1.5 a 16 carros de
combate. 10 de julio en una de las elevaciones al sur de Kashira fue
detectada una gran concentración de carros. Fue enviado un grupo de
IL-2 con el objetivo de efectuar un ataque concentrado. En la zona
quedaron dañados 30 carros y otros 14 en llamas, los demás se
dispersaron y comenzaron a retirarse de forma desorganizada en
dirección al norte. 9 de julio a las 06:00 fue efectuado un ataque
concentrado sobre la 9ª División Acorazada enemiga (en la zona de
Soborovka); ésta división se preparaba para comenzar una ofensiva.
Como resultado del ataque, en el cual participaron 110 bombarderos y
62 IL-2 (todos del 16º VA), la ofensiva enemiga fue frustrada…”
{2}.
En los informes de estado mayor de la 225ª ShAD
del 15º VA, relativos a la eficacia del empleo de las PTAB, consta
lo siguiente: “15 de julio de 1943 cuatro tripulaciones del 614º
Regimiento Aéreo de Asalto de Kursk atacaron a los carros de combate
enemigos (8 de los cuales fueron “Tigres”), los cuales a su vez
contraatacaron nuestras posiciones al suroeste de Podmaslovo. Las
tripulaciones usaron las PTAB. Fueron incendiados 7 carros, 4 de los
cuales eran pesados… El 16 de julio de 1943 a las 13:03 19
tripulaciones (líder del primer grupo St. Leytenant Rogachev, líder
del segundo Capitán Chernyavskiy) atacaron a los carros de combate
en la zona de Podmaslovo, Prilep, Filatovka y Mojovoe. Fueron
eliminados 10 carros de combate y derribados 3 aviones FW-190 (por
el Sargento Marchkov, Ml. Leytenant Solyanikov y St. Leytenant
Kozlovskiy)… El día 16 de julio 23 tripulaciones del 810º Regimiento
de Asalto en la zona de Podmaslovo, Fedorovka y Folatovka, aparte de
otros tipos de bombas, lanzaron 2.700 bombas PTAB, eliminando a 17
carros de combate” {2}.
La eficacia de las acciones de la aviación de
asalto soviética se confirma por los alemanes.
Ex jefe del Estado Mayor del 48º Cuerpo
Acorazado (alemán) General F. W. von Mellenthin escribió: "muchos de
nuestros carros fueron victimas de la aviación soviética, a pesar de
que la aviación alemana tenia el dominio aéreo. Los pilotos rusos
mostraron un coraje sin precedentes" {3}.
En el diario de operaciones bélicas del 4º
Grupo de carros de combate alemán (a fecha de 24 noviembre de 1941)
consta: "los ataques de los bombarderos y los IL-2 rusos nos
causan grandes bajas" {5}.
El Comandante del 2º Grupo de carros de combate
Guderian en su informe al Mando Central hizo constar: "Los IL-2
nos causan disgustos…"
Inspector de la aviación de la defensa
antiaérea de Alemania, Galland, hizo constar en sus memorias: "Todos
los que han estado en el Este, pueden confirmar, cuanta sangre
habían derramado los IL-2".

Columna alemana eliminada por los IL-2 en Bobruysk
El soldado de primera, Friedrich Alfred, estuvo formando parte de la
3ra compañía del 677º batallón ferroviario y fue hecho
prisionero el 2 de julio de 1944 a 4km al noreste de Berezina
durante la operación ofensiva del 2º Frente Bielorruso. Durante el
interrogatorio hizo constar:
"Las columnas alemanas que se desplazaban
por la carretera Orsha-Minsk, tomaron dirección hacia el sur por la
carretera Mogilev-Minsk. En las carreteras que atravesaban los
bosques éramos atacados de forma ininterrumpida por los IL2, los que
causaban a nuestras columnas daños catastróficos. Debido a que los
vehículos se movían por las carreteras en 2-3 filas, las bajas
causadas a menudo eran de 50-60%. En la columna que estaba yo, el
50% de todo el personal fue matado por los aviones rusos.
Todas las carreteras por las cuales
retrocedíamos estaban sembradas de miles de vehículos y remolques
destrozados, cadáveres de caballos y de soldados. El daño moral
causado por la aviación rusa era enorme. Cuando aparecían los
aviones rusos, nuestros soldados abandonaban sus vehículos en las
mismas carreteras y se iban corriendo para esconderse en los
bosques. Los vehículos y otros medios de transporte intentaban
escaparse de la carretera, se atascaban en los pantanos y creaban
continuos atascos en las carreteras..."
{5}.
Comandante del 4º Ejercito Kurt von
Tippelskirch más adelante escribió: "Los continuos ataques de la
aviación enemiga nos causaban desastrosos daños... creaban infinitos
atascos entre las columnas que estaban en retirada. Los IL-2 rusos
destruían continuamente los puentes a través de Berezina, y en
consecuencia en la costa oriental se creaban gigantescas
concentraciones de vehículos".

Puente del río Berezina, destruido por los IL-2 del 4
Ejercito del Aire
Teniente general Joachim Insel, el cual fue
comandante de la 65ª División de infantería, hecho prisionero el día
11 de julio de 1944 al sur de Minsk, dio la siguiente valoración al
trabajo de la aviación de asalto soviética: "en las grandes
operaciones efectuadas por las tropas rusas la aviación jugó un
papel crucial y fue la base de su éxito. La aviación influyó sobre
el resultado de toda la campaña en dicho segmento del frente. Los IL-2,
utilizados en grandes cantidades, fueron un medio eficaz, el medio
que frustró la retirada planificada de nuestras tropas que iban de
camino para ocupar nuevas posiciones defensivas. Tras haber
frustrado el flujo de nuestras columnas y haber sembrado el pánico,
la aviación rusa no dio oportunidad a nuestras tropas para oponer
una resistencia de forma organizada en un obstáculo natural tan
importante como Berezina. El daño moral causado por la aviación
soviética era enorme. Nuestros mandos eran completamente incapaces
de luchar con una superioridad aérea como esa".
Las fotos que vienen a continuación son de los archivos del 16
Ejercito del Aire, 1er Frente Bielorruso. El 9 ejercito alemán en
Bobruysk fue atacado desde dos direcciones, las cuales eran
orientados hacia Bobrúys. Cuando los alemanes no pudieron contener el
avance soviético, sus unidades se lanzaron a retirarse hacía
Bobruysk por la carretera de Zhlobin y Rogachev y a las zonas donde
se cruzaba el río Berezina, donde había un puente.
Las columnas alemanas enseguida se convirtieron en un objetivo para
la aviación soviética del 16 Ejercito del Aire. Moverse fuera de las
carreteras era difícil debido al pantanoso y boscoso terreno, con
lo que los alemanes se concentraban en las carreteras. La situación
había empeorado drásticamente, cuando el 27 de junio de 1944 al
cruce de las dos carreteras salió el 9 Cuerpo Acorazado soviético.
En las carreteras se formaban gigantescos atascos, los cuales eran
continuamente atacados por la aviación soviética. Aquí algunos
ejemplos:

Cañón autopropulsado tipo "Hummel" (izquierda), Flak-18, Pz.IV
(centro) y otros vehículos (gracias por la foto a Alexey Isaev)

Columna alemana en la carretera de Zhlobin. "Stug" tiene el techo
arrancado. Lo mas probable como resultado del impacto de una PTAB
lanzada por un IL-2, con la posterior detonación de la munición
(gracias por la foto a Alexey Isaev).

Columna alemana en la carretera de Zhlobin (gracias por la foto a
Alexey Isaev).

Columna alemana en la carretera de Zhlobin (gracias por la foto a
Alexey Isaev). Marder de las ultimas series y un Flakvierling

Columna alemana en la carretera de Zhlobin (gracias por la foto a
Alexey Isaev). Impacto directo de una FAB-250 en la concentración de
artillería y vehículos concentrados en la carretera. Como resultado,
el trafico se había paralizado completamente. Carretera de Zhlobin,
cerca de la aldea Dubovka.

Debido al infierno que reinaba en la carretera de Zhlobin, parte de
las tropas alemanas se lanzaron hacia el puente de Berezina,
desplazándose a lo largo de las vías férreas. Pero en la zona del
puente les esperaba otra sorpresa, preparada por la aviación
soviética (gracias por la foto a Alexey Isaev).

Zona del puente a través del río Berezina (gracias por la foto a
Alexey Isaev).

La típica situación de la derrota nazi en1944.Las columnas en
retirada (Bielorrusia) eran atacadas en todo momento
impunemente (las bajas de la aviación soviética fueron prácticamente
nulas) por la aviación soviética
(gracias por la foto a Alexey Isaev).

Estas kilométricas columnas destruidas estaban por todos lados. Los
barriles para combustible se encontraban con frecuencia por estas zonas
(gracias por la foto a Alexey Isaev).

"Stug" en un puente. Según las notas adjuntas a esta foto
del archivo, se estaba desplazando una
columna alemana, en la cual había un "Stug" (reconocido por los
pilotos soviéticos como "tanque"). "Stug" entró en el puente justo
cuando comenzó el ataque de los IL-2. El puente fue reventado por
los IL-2. La columna quedó paralizada (puente destruido), con lo que
en breve fue aniquilada. Los hechos ocurrieron en el río Basya
(gracias por la foto a Alexey Isaev).
Comandante del Grupo de Ejércitos “Prusia
oriental”, Teniente General de los Ejércitos Acorazados Dietrich von
Saucken hizo constar:
“La aviación soviética jugó un papel
extremadamente elevado para ayudar al Ejercito Rojo a lograr el
éxito, sobre todo últimamente. Las fuerzas aéreas alemanas durante
los últimos dos años llevaban un gran retraso respecto a la aviación
rusa. La aparición de los aviones en el campo de batalla tenía una
gran importancia para el resultado final de los combates en tierra.
La eficacia de la aviación rusa en la zona de Danzig fue enorme…
La aviación paralizó la maniobrabilidad de
nuestras tropas, impedía el traslado de reservas hacia el frente,
atacaba continuamente a nuestras comunicaciones. Nosotros no pudimos
hacer nada contra este poderío aéreo de los rusos para defender a
nuestras tropas de sus ataques aéreos masivos… porque nuestros cazas
fueron neutralizados por la enorme superioridad rusa en el aire,
mientras que nuestra artillería antiaérea en gran parte fue
eliminada o se quedó sin municiones… La aviación rusa prácticamente
sin ningún impedimento realizaba ataques sobre nuestras tropas en la
zona de Danzig, en Prusia Oriental, causando grandes bajas a
nuestras tropas con sus bombardeos y asaltos aéreos… Sobre todo
actuaban muy bien los aviones IL-2, los cuales realizaban ataques
incesantes sobre las posiciones de infantería, de artillería y sobre
los medios de transporte por carretera, empleando con eficacia el
armamento de abordo y las bombas de fragmentación”

Columna motorizada alemana. Bielorrusia, 1944

Batería de artillería alemana eliminada. Bielorrusia, 1944.
El Comandante de la 1ª Brigada de morteros
pesados Teniente General Gross destacó: “En los últimos combates
los rusos emplearon de forma masiva a sus IL-2. Los IL-2 son un arma
eficaz para prestar apoyo a sus tropas terrestres. En el campo de
batalla los IL2 no siempre llegan a causar grandes bajas, pero el
daño moral que causan siempre es enorme… los daños que sufre nuestra
artillería… a causa de la aviación rusa… llegan hasta 60% del total
de las bajas”.
El Comandante de la 203ª División de infantería
Teniente General Gedike hizo constar: “durante los combates en la
zona de Heiligenbeil en el mes de febrero, nuestra artillería era
neutralizada básicamente por los ataques de los IL2. Sobre todo
fueron eficaces los ataques aéreos sobre el puerto Hel, donde fueron
hundidos y dañados una gran cantidad de navíos”.
Durante la operación de
Yassy-Kishinev (agosto de 1944) llevada a cabo por el 2º Frente
Ucraniano, en la principal dirección de ataque del 27º Ejercito (en
su sector se había introducido las principales fuerzas del 6º
Ejercito Acorazado), durante las 4 primeras horas de la ofensiva
sobre el campo de batalla se encontraban en todo momento entre 28 y
32 IL-2, formando grupos de 12-16-20 aviones. Estos estaban
encargados de prestar el apoyo aéreo directo a las tropas que
efectuaban el ataque. Las posteriores actuaciones de los IL-2 sobre
las tropas enemigas, que se dieron a la fuga, desorganizaron por
completo la dirección de las tropas y frustraron la maniobra de las
reservas en dicho segmento del frente.
Uno de los oficiales alemanes, hecho prisionero
en aquella operación, durante el interrogatorio describió de la
siguiente manera la actuación de los IL-2: “Cuando el ataque de
artillería (soviética) cesó, pensamos que a partir de ahora podremos
recuperarnos y resistir el ataque
de la infantería rusa y sus carros de combate,
pero en el aire aparecieron los IL-2 y no nos dejaron en paz, nos
obligaron a abandonar nuestras armas y nos hicieron correr para
salvarnos. Los IL-2 estuvieron encima de nosotros en todo momento.
Era un horror indescriptible…” {6}.
Es así como valoran los soldados y generales
alemanes al IL-2. Este avión tuvo muchos nombres. Los
ingenieros soviéticos lo llamaron "Tanque volador". Los pilotos
soviéticos "Jorobado", por su característico perfil. Los pilotos
alemanes lo llamaron de muchas maneras: "Betonflugzeug"
(avión de hormigón), "Zementbomber"
(bombardero de cemento). Las tropas terrestres alemanas lo llamaron
"Schlächter"
(carnicero), "Fleischwolf" (picadora de carne), "Eiserner
Gustav" (Gustav de acero), "Schwarzer
Tod" (muerte negra).

IL-2 atacando el aeródromo
alemán.
Los pilotos del Ju 52/3m de 3/KGr.z.b.V.9 intentaron esconderse
debajo de su avión (se salvaron pero con graves heridas)
Del informe “Eficacia de las acciones de la
aviación sobre tropas y material bélico enemigo” (disponible en este
portal
aqui) podemos extraer siguientes
conclusiones
{300}:
“Para destruir a los carros de combate, la
aviación utiliza bombas de fragmentación de 20-25kg, bombas de
fragmentación/explosivas de 50kg (proyectiles de artillería
transformados), bombas FAB-50 y FAB-100, bombas especiales anticarro
PTAB-2.5-1.5, así como el fuego de los cañones de 23mm “VYa” y los
cañones de 37mm del sistema OKB-16.
De todos los medios de destrucción mencionados
anteriormente, solamente la PTAB-2.5-1.5 es considerada como una
bomba universal: esta bomba tiene suficiente potencia para destruir
carros de combate de cualquier tipo, así como cualquier otro
objetivo móvil blindado que suele encontrarse en el campo de batalla
(cañones autopropulsados, vehículos blindados, transportadores
blindados). El resto de las bombas destruyen primordialmente solo a
los carros de combate ligeros y en parte a los carros medios; los
carros pesados pueden ser eliminados con las bombas de propósito
general (FAB) solamente con un impacto directo, y con las bombas de
fragmentación/explosivas (OFAB) cuando impactan en las partes más
vulnerables del carro.
La bomba PTAB-2.5-1.5 fue empleada por primera
vez por nuestra aviación durante las operaciones del verano de 1943.
A pesar de su reducido peso (1.5 – 1.6kg) esta bomba con un impacto
directo a un ángulo de 0º perfora la coraza de hasta 60mm de grosor.
Al mismo tiempo, al impactar en el casco del carro, la bomba provoca
el incendio de los depósitos de gasolina, elimina con su onda
expansiva y con los fragmentos de la coraza a la tripulación del
carro, y en algunos casos hace detonar la munición del carro.
La elevada eficacia de esta bomba viene
explicada por su funcionamiento: la onda expansiva es concentrada en
un punto y su velocidad alcanza 11.000 m/seg. El uso bélico de las
PTAB demostró su elevada eficacia a la hora de atacar a los carros
de combate y a los cañones autopropulsados, así como a los vehículos
de transporte, trenes blindados y otros objetivos.
El estudio de la eficacia de la acción de las
PTAB sobre los carros de combate y cañones autopropulsados,
eliminados por nuestros aviones de asalto y abandonados por el
enemigo durante su retirada demuestra que con un impacto directo en
un carro de combate (cañón autopropulsado), el último es eliminado
por completo o deja de ser operativo.
El impacto de una PTAB en la torre o en el
casco del carro provoca el incendio o la explosión de su munición,
con lo que finalmente el carro es eliminado por completo. Además, la
PTAB-2.5-1.5 elimina con éxito tanto a los carros ligeros como a los
carros pesados. Por ejemplo, en el campo de batalla en la zona de
Ponyri se había localizado un cañón autopropulsado “Ferdinand”,
eliminado por una PTAB. La bomba impactó en la tapa blindada del
depósito de combustible izquierdo, perforó la coraza de 20mm,
destruyó por la onda expansiva el depósito e incendió la gasolina.
El incendio eliminó todo el equipo del carro e hizo estallar la
munición.
En la zona de la estación Jotynets se había
encontrado un carro pesado P-V (“Pantera”), destruido por los
impactos directos de 3 PTAB. Las bombas impactaron en el cinturón
blindado inclinado del casco del carro bajo la base de la torre,
perforaron la coraza de 45mm y provocaron el incendio del carro.

Pz.V "Pantera" (otro, no el que se menciona mas arriba), eliminado a
10km de Butuvo por los IL-2. El impacto de una PTAB-2.5-1.5 hizo
detonar su munición. Dirección de Belgorod, julio de 1943.
En la zona de la aldea Dragunskaya (a 10km al
norte de Tomarovka) el enemigo abandonó en el campo de batalla a 6
carros P-V, destruidos por las bombas PTAB-2.5-1.5. Todos ellos se
quemaron, y en los 4 de ellos detonó la munición.
El uso de las PTAB elevó la eficacia de nuestra
aviación contra carros de combate enemigos. El uso de las
PTAB-2.5-1.5 incrementó muchas veces la probabilidad de un impacto
directo en un carro de combate, dado que una gran cantidad de
bombas, lanzadas desde un solo avión, cubre un gran área, al mismo
tiempo creando dentro de esta área una suficiente densidad de
explosiones. La banda de la dispersión de las bombas lanzadas desde
un solo avión en muchas ocasiones cubre a 2-3 carros a la vez,
alejados a 60-75m unos de otros. Por eso, como resultado de las
acciones de nuestra aviación, incluso las formaciones de combate y
columnas de carros dispersas, como norma general, sufren grandes
bajas. Esto se confirma por los siguientes ejemplos.
El 15 de julio de 1943 cuatro IL-2 del 614 ShAP
atacaron en la zona de Podmaslovo (Frente de Bryansk) a un grupo de
carros de combate que avanzaban en una formación formada por 25
unidades, entre los cuales había hasta 10 “Tigres”. El lanzamiento
fue efectuado en vuelo horizontal a una altitud de 130-150m. Las
tripulaciones lanzaron 1.190 bombas PTAB-2.5-1.5. Como resultado, se
incendiaron 7 carros, de los cuales 4 fueron carros pesados.
El 16 de julio de 1943 23 aviones IL-2 del 810
ShAP atacaron la concentración de carros de combate y de vehículos
en la zona de Podmaslovo, Fedorovka, Filatovo. Fueron lanzadas 2.700
bombas PTAB. Como resultado del ataque, fueron eliminados, según
observaciones de las tripulaciones, 17 carros de combate y hasta 40
vehículos.
El 7 de julio de 1943 dos octetos de IL-2 de la
291 ShAD atacaron a una columna enemiga, que contaba aproximadamente
con 40 carros de combate. Se dirigían desde Tomarovka hacia
Cherkasskoe. Cada grupo de los IL-2 realizó 2 pasadas sobre el
objetivo, lanzando las bombas anticarro desde 300-200m del altitud.
Como resultado del ataque, fueron incendiados hasta 20 carros de
combate. El movimiento de la columna fue frustrado, dado que el
enemigo se retiró de la carretera y se apresuró en dispersarse en
los bosques y cañadas cercanas.
La experiencia que se obtuvo usando las
PTAB-2.5-1.5 demuestra que los mejores resultados se consiguen
cuando las bombas se lanzan desde una altitud de 400-300m en la
salida del planeo, o bien desde 120-150m de altitud en vuelo
horizontal. El lanzamiento desde altitudes de 500m o superiores
provoca una gran dispersión de las bombas, con lo que la densidad de
los focos de destrucción es insuficiente, dado que las bombas caen a
una distancia de 30-40m una de la otra. Hubo casos sueltos cuando
las bombas PTAB eran empleadas contra carros de combate escondidos
en los bosques, lo que tampoco daba el efecto esperado, porque las
PTAB detonaban al chocar contra las ramas de los árboles y no
llegaban alcanzar a los carros.
CONCLUSIONES:
1. La eficacia de la aviación contra los carros
de combate usando bombas de fragmentación, bombas explosivas y los
cañones, es baja. Las unidades y agrupaciones de carros de combate
que usan ampliamente medios de camuflaje y se dispersan, como norma
general sufren bajas insignificantes.
2. El medio más eficaz para luchar contra
carros de combate son las bombas especiales anticarro PTAB-2.5-1.5,
que con un impacto directo en el carro de combate o cañón
autopropulsado de cualquier tipo, como regla general, lo dejan fuera
de servicio o lo destruyen por completo a causa del incendio
provocado y por la detonación de su munición que lleva dentro.
3. El uso de las PTAB incrementa muy
considerablemente la probabilidad de un impacto directo en los
objetivos blindados de reducido tamaño, dado que las bombas lanzadas
por un solo avión cubren una gran área, creando una densidad de
explosiones suficiente para destruir un objetivo de pequeñas
dimensiones.
4. La eficacia de las PTAB se reduce
considerablemente cuando se ataca a los carros de combate que se
refugian en un bosque denso, dado que la explosión se produce arriba
y no llega a dañar a los carros. En estos casos para luchar contra
carros hay que emplear bombas explosivas FAB-100, y en épocas secas
del año, lanzar AZh-2 (ampollas incendiarias) con KS (liquido
autoincendiario) con el objetivo de provocar un incendio en el
bosque y expulsar al enemigo hacia fuera del mismo”
{300}.
También son interesantes las apreciaciones
sobre las bombas PTAB de los pilotos
cuyas entrevistas se disponen en
este mismo portal.
Entrevista a Timofey Panteleevich Puniov,
piloto de Pe-2 (leer la entrevista completa
aqui):
A.S. ¿Utilizaban las PTAB de forma
frecuente?
T.P.
Si, las utilizábamos a menudo. El lanzamiento de las PTAB era un
método de bombardeo muy eficiente. Cuando se detectaban agrupaciones
de maquinaria o carros de combate, enseguida nos mandaban para
atacarlos
con las PTAB. Incluso un solo avión solitario cargado con
400 PTAB podía eliminar a un montón de objetivos, ya que las bombas
se dispersaban en una nube y cubrían un área grande. Habitualmente
en la misión intervenían 9 o 15 aviones. Imagínate el infierno allí
abajo. PTAB era una bomba pequeña, pero muy mortífera.
Te contaré un caso ocurrido en el 1945.
Mandaron en misión de
reconocimiento a Yuriy Gnusarev. Hacia un tiempo asqueroso: niebla
densa, visibilidad horizontal no superior a un kilómetro, lo que
para un avión tan rápido como el Pe-2 es una distancia
insignificante. De repente nos comunica por la radio: “¡Atacar
Biskau, hay carros de combate!”. De forma urgente reúnen a 15
tripulaciones, a las más expertas, las que no podrían fallar. Entre
los elegidos estaba yo. El navegante del avión líder tendría que ser
un fiera para poder dirigir al grupo en estas condiciones
meteorológicas. Teníamos a uno así en nuestro escuadrón: era
Konstantín Borodin, un navegante por vocación. No sé como se
sentían
los demás, pero yo estaba realmente acojonado mientras íbamos de
camino hacia el objetivo.
Si navegante se hubiese
desviado lo mínimo, seguro que nos estrellábamos contra el suelo.
¡No se veía un carajo! Volábamos sobre unos 350 metros: si subes un
poco más, no ves la tierra. Pero Konstantín hizo bien su trabajo.
Nos llevó directamente hacia aquella columna de los blindados
alemanes. Era una concentración de blindados tremenda. Tuvimos el
contacto visual a través de la niebla durante la primera pasada,
pero ya cuando estaban justo debajo de nosotros. Esta claro que en
esta situación no se podía lanzar las bombas. Si hubiéramos
bombardeado, las bombas se pasarían y caerían por delante del
objetivo. Los alemanes no disparaban, a lo mejor pensaron que no les
habíamos descubierto, o es que aparecimos tan de repente que no les
dio tiempo a reaccionar. Seguramente las dos cosas a la vez.
Viramos, y en formación de 3 grupos de cinco nos pusimos en posición
de ataque.
Cuando nos pusimos en
posición de ataque, los alemanes comprendieron que habían sido
descubiertos, y abrieron un fuego brutal. Disparaban con todo lo que
tenían, desde ametralladoras de mano hasta con cañones antiaéreos.
Lanzamos las bombas pero seguimos sin cambiar de trayectoria de
vuelo, ya que teníamos que efectuar el fotocontrol para registrar
los daños causados. Estos últimos segundos adicionales jamás los
olvidaré.
Aterrizamos todos, ¡nadie
fue derribado! A mi me tocó aterrizar ultimo. Salgo contento del
avión, y me quedo a la espera de la llegada mi mecánico para que me
traiga el tradicional cigarrillo (teníamos una tradición: cuando un
avión estaba a punto de aterrizar, el mecánico preparaba el
cigarrillo. Al apagar los motores, hacíamos la primera calada
prácticamente sin bajar del avión. ¡Es un autentico placer fumarte
un cigarrillo después del combate!). Yo estaba de buen humor, veo
que todos ya están fumando, pero veo que el mecánico esta muy serio.
Le digo: “¿que te pasa?”. Y me contesta: “¡mire esto, comandante!”.
Miré alrededor y vi que nuestros aviones estaban todos llenos de
agujeros. Todos estaban llenos de impactos. A alguno le falta mitad
de cola, otros con agujeros para meter la cabeza. Empezamos a
examinar mi avión: ¡ni un rasguño! Luego cuando lo inspeccionamos en
detalle, en el carenado del radiador de aceite derecho encontramos
una ralla provocada por una bala. ¡Nada más! Yo siempre tuve suerte.
Después de analizar los
resultados registrados por las cámaras de fotocontrol, nos
comunicaron: “¡Esta
vez os habéis pasado!”.
El día siguiente el servicio de reconocimiento nos informó que en
aquel combate eliminamos a 72 blindados, y eso sin contar a otro
tipo de maquinaria. Fue un combate muy eficiente, yo diría que fue
un combate único.
Entrevista a Grigoriy Ryabushko, piloto de
IL-2 (leer la entrevista completa
aqui):
Las PTAB se utilizaban con mucha frecuencia.
Iban en dos contenedores, unas 60 bombas en cada contenedor. Los
contenedores se anclaban dentro de la bodega de bombas. Las PTAB
eran muy eficientes y destructivas.
Antes de la aparición de las bombas PTAB,
cuando surgía la ocasión, disparábamos a los tanques con cañones.
Pero cuando empezaron a suministrar las PTAB, enseguida dejamos de
atacarlos con cañones. ¿Para que vas a cazar tanques solitarios
cuando puedes verter 120 bombas PTAB desde 100 metros de altitud y
destruir 5-10 tanques de golpe?
No menos interesantes serian los informes de
los pilotos que se graduaron en la Academia Militar del Aire (VVA de
Gagarin). Estos informes fueron una especie de “tarea de casa” para
los alumnos de VVA, disponibles en este portal
aqui.
Los ejemplos de uso de las bombas PTAB se encuentran en los informes
de combate de
Aleksandr Kirilov,
Aleksandr Efimov,
Mijaíl Odintsov,
Fedor Shmyrin,
Aleksandr Karpov,
Aleksandr Karushin,
Anatoliy Rybakov,
Lev Korchagin.
|