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Mijail Dmitrievich Baranov: El Terror de los Nazis

 

Por Diego Zampini

 

 

En la literatura militar occidental, mientras que los abultados tanteadores de los ases alemanes han sido tomados como una verdad indiscutible, los más humildes (pero más creibles) palmareses de los ases rusos han sido mirados con escepticismo, como exageraciones de la propaganda estalinista. Uno de estos ases, el Starshiy Leytenant Mijail Baranov, fue apodado "Ãðîçà ôàøèñòîâ" (“Groza Fashistov” = El Terror de los Nazis). Este artículo demostrará que su apodo no fue ni propaganda ni exageración.

 

Como toda biografía, deberemos comenzar por el principio de la vida de este extraordinario piloto. Y dicho comienzo ocurrió el 21 de octubre de 1921, en la aldea de Gorki, región de Kingisepp (provincia de Leningrado), cuando el campesino Dmitriy Baranov y su esposa recibieron en su seno un nuevo hijo, al que llamaron Mijail. No se sabe mucho de su infancia y su juventud, solo que terminó la escuela en 1937, y que a esos tempranos 16 años entró a trabajar como aprendiz de tornero en la fábrica Kirov en Leningrado. Como muchos jóvenes de la época se vió inspirado por las hazañas de aviadores como Chkalov y Baydukov, y decidió hacerse piloto. Por lo tanto, en parelelo a su trabajo en la fábrica, se unió a la DOSAAF y asistió al aeroclub central de Leningrado. Terminó el curso de piloto en octubre de 1938, y lo hizo con calificaciones tan altas, que sus compañeros de la fábrica y las autoridades del aeroclub lo animaron a que siguiera la carrera de aviador militar.

 

Fue enviado a la Escuela de Aviación Militar de Chuguev, y allí nuevamente pronto se distinguió por ser aplicado e inteligente. Sus instructores pronto se dieron cuenta del potencial del muchacho (¡que aún no tenía 17 años!), y le instruyeron bien para “sacarle todo el jugo”. En octubre de 1940, con solo 19 años, se graduó de piloto militar con el rango de Ìëàäøèé Ëåéòåíàíò (Mladshiy Leytenant = Teniente Junior, Subteniente o Teniente 2º), y originalmente fue asignado al 271º IAP de la Distrito Militar del Báltico. Luego en mayo de 1941 fue reasignado al 183º IAP de la 269ª IAD en el Frente Sur, equipado con el caza de nuevo diseño Yakovlev Yak-1, y allí estaba cuando comenzó la Gran Guerra Patria.

 

Bautismo de Fuego

 

Sus comandantes se dieron cuenta pronto que, pese a ser tan joven, tenía cualidades de mando, y desde el mismo principio de la guerra fue designado komandir zvena o comandante de zveno (grupo de tres o cuatro aviones). Sus dos primeras victorias las obtendría el 22 y el 28 de septiembre, en que reclamó derribar un “Messer” en cada una de estas fechas. En ambos casos, sin embargo, la búsqueda en los archivos de la Luftwaffe no permite corroborarlas. Es probable que, debido a su relativa inexperiencia en combate, Baranov haya creído en buena fé abatir estos cazas en sus ataques, pero en realidad estos pudieron volver a su base con daños muy leves, del orden del 5 % (los daños de tan baja entidad directamente ni se mencionaban en los registros de pérdidas alemanas).

 

No es el caso de las tres victorias reclamadas el 30 de octubre de 1941. Un monoplano Henschel Hs.126 estaba realizando corrección artillera cerca de Novomoskovsk, permitiendo a los cañones y los obuses alemanes castigar las posiciones soviéticas en la zona – eliminar esa amenaza era de la máxima prioridad. Por eso se envió un zveno de Yak-1 líderado por el mejor piloto del 183º IAP (o sea, Baranov) a interceptarlo. Suponiendo que el Henschel contaría con escolta, Mijail Baranov decidió ubicarse entre el sol y sus blancos, a mayor altura que estos. Desde esta posición “desde el sol” se lanzó en picado y acribilló al Hs.126B-1 WkNr 3457. Su desconocido piloto logró hacer un aterrizaje de panza, que resultó en la destrucción del 40% de la aeronave – este informó luego, que creía haber sido alcanzado por fuego antiaéreo: Nunca vió venir a Baranov. De hecho, tras ascender de nuevo a su posición de ataque, Baranov se sorprendió al ver que los cuatro “Messers” de la escolta tampoco se habían dado cuenta de su presencia. Esta era una oportunidad que el agresivo Mijail no podía desaprovechar: se aproximó sigilosamente al schwarm teutón, listo para repetir su ataque. Pero a diferencia de sus enemigos germánicos, que generalmente elegían atacar al avión soviético que iba más atrás. Mijail Baranov eligió al Messerschmitt líder – suponía (acertadamente) que al derribar al avión del jefe, esto dejaría a los restantes desorientados, sin saber que hacer. Con esto en mente, repitió su ataque. Los proyectiles disparados por el Yak-1 de Baranov despedazaron el Bf.109E-7 del Oberleutnant Walter Höckner, el Staffelkapitan del 6./JG 77, el cual se precipitó en llamas a tierra con su piloto muerto en los controles. Aprovechando la confusión, Mijail y sus compañeros se retiraron antes de que los restantes cazas alemanes pudieran reaccionar.

 

Esa tarde, durante una misión de reconocimiento, Mijail Baranov encontró un solitario Junkers Ju.88A-5 del I./KG 77, y lo transformó en su quinta victoria oficial – los cuatro tripulantes del bombardero saltaron del ardiente bombardero, solo para ser capturados por tropas soviéticas tan pronto como llegaron al suelo. El joven piloto ruso, que había cumplido 20 años solo nueve días antes, había demostrado que el anotarse tres victorias en un solo día no era un privilegio de los experten de la Luftwaffe.

 

 

Mijail Dmitrievich Baranov es felicitado por sus victorias. De su total de 25 victorias personales, una altísima proporción se verifican: 22 coinciden con aviones de la Luftwaffe realmente destruidos o dañados, un increible tasa de confirmación del 88%. Estos incluyen 17 derribados (ocho Bf.109E/F/G, cuatro Ju.87B/D, dos Ju.88A, dos Hs.126B y un MC.200) y cinco averiados (tres Bf.109, un Hs.126B y un Fi.156).

 

Las circunstancias de sus derribos Nº 3 y Nº 4 se repitieron pocos días después, el 8 de noviembre. La única diferencia es que esta vez volaba solo, realizando un vuelo de reconocimiento. A la distancia divisó a otro Henschel, de nuevo escoltado por un cuartero de “Messers” – todos parecían no haberlo visto. De nuevo Baranov se lanzó al ataque “desde el sol”, y un par de cortas ráfagas fue todo lo que necesitó para enviar a ese monoplano -el Hs.126B WkNr 3412, del 1.(H)/23- fuera de control hacia el suelo. A último momento su piloto pudo recuperar el aparato y aterrizar de panza, pero igual el avión fue dado de baja como chatarra.

 

Mijail ganó altura y regresó a su posición por encima del enemigo, solo para ver con asombro que estos aún no se habían apercibido de su presencia. El combate era un calco de la batalla que había tenido lugar diez días atrás. Mijail Baranov no desperdició la oportunidad: se lanzó de nuevo en picado, puso al “Messer” líder en la mira de su Yak-1, y presionó los gatillos. De nuevo proyectiles de 20 mm y balas de 7,62 mm sacudieron al caza Messerschmitt, esta vez el Bf.109F-4 WkNr 7183, aunque su tripulante -el Gruppen Adjutant del III./JG 52 y experte con 27 victorias Oberleutant Kurt Schade- logró saltar sano y salvo en paracaidas. Esta vez los restantes Bf.109 contratacaron y persiguieron al aviador eslavo, pero pese a que averiaron levemente al caza Yakovlev, Mijail pudo finalmente evadirlos y regresar victorioso a su base. En el lado alemán el piloto del Henschel creyó en buena fé haber sido derribado por la antiaérea, ya que nunca vió al Yak de Baranov. Es muy probable que los pilotos de los “Messer” se dieran cuenta que en realidad lo había derribado el mismo caza soviético que abatió a Schade. Pero si este fue el caso, no dijeron nada – no quisieron ser enjuiciados por haber fallado en su misión de proteger al vulnerable avión de corrección.

 

En esa época sus adversarios cazadores de la Luftwaffe eran, sin duda,  los pilotos más experimentados del mundo. Y sus tanteadores aumentaban aún más debido a la táctica llamada Freie Jagd (caza libre). Esta consistía en buscar aviones soviéticos que durante un combate se hubieran separado de sus compañeros, o acechar cerca de los aeródromos conocidos de la VVS, para sorprender incautos pilotos que hubieran bajado la guardia o que regresaran cortos de munición y combustible. En una ocasión (en fecha no determinada) Mijail sufrió en sus carnes esa experiencia, cuando (según su informe) fue sorprendido por cinco Bf.109 alemanes despues de haberse separado de su grupo. Tras varios minutos de lucha desigual su caza Yak fue alcanzado y comenzó a arder. Debió Baranov entonces saltar en paracaidas, no solo cayendo en territorio controlado por la Wehrmacht, sino también fracturándose la pierna al tocar tierra con demasiada violencia. Pero fue en esas circunstancias que demostró el joven piloto la fortaleza y la determinación que lo caracterizaban. En el transcurso de dos semanas, y a pesar de su pierna herida, pudo recorrer las decenas de kilómetros que lo separaban del frente, viéndose obligado en una ocasión a matar un soldado enemigo con su pistola Tokarev TT-33. Cuando por fin llegó a sus propias líneas fue llevado a una enfermería de campaña, donde el médico aconsejó amputar la pierna fracturada. Pero a sabiendas que eso podría poner fin a su carrera como piloto, y también comprometer sus posibilidades de encontrar trabajo cuando la guerra terminara, Baranov se negó rotundamente. Tras varias operaciones difíciles pudieron los médicos salvarle la pierna, y Mijail pudo volver a su unidad a principios de 1942. De este revés Mijail aprendió las lecciones que luego cimentaron su posterior éxito.

 

Doctor Jekyll y Mister Hyde

 

Como un solo hombre, todos aquellos que conocieron y trataron personalmente a Baranov coinciden en lo mismo: en tierra era un muchacho tímido y modesto, que no se vanagloriaba de sus logros, y un ser sensible que se angustiaba por las desgracias de los miles de refugiados que huían del avance nazi. Pero una vez en la cabina de su Yak-1 y en el aire, sufría una transformación radical: se transformaba en un piloto agresivo, que siempre estaba buscando encontrar aviones enemigos para enzarzarse en combate con ellos. Esta aparente contradicción entre una persona suave y callada en tierra (un “Doctor Jekyll”), y un letal aviador capaz de sembrar devastación entre sus adversarios (un “Mr. Hyde”) ha sido una característica distintiva de muchos ases famosos. La siguiente anécdota dice mucho acerca de la calidad humana de Baranov:

 

Ivan I. Pstygo: “Amante de la vida por naturaleza, un excelente cantor y bailarín, él [Baranov] odiaba ferozmente al enemigo, y solía decir: ‘Siempre que veó a los nazis, siempre quiero aplastar a un canalla.’ Pero también era una persona de un alma bondadosa. Recuerdo que, en julio-agosto de 1942, durante los combates por Stalingrado, muchos refugiados y habitantes de la zona, al no haber podido irse hasta la retaguardia, se alojaban con sus niños en chabolas.  Vimos que Mijail una y otra vez separaba parte de su desayuno o su almuerzo, lo envolvía en papel y lo llevaba hacia una de las chabolas.

 

Lo observamos y lo seguimos. Resultó que, durante un mes completo Misha alimentó a una madre con tres pequeños, salvándolos de morirse de hambre. Comenzamos a reducir nuestra ración, y dimos a esta familia esas provisiones.”

 

Para los que no lo saben, Iván Ivanovich Pstygo fue uno de los más destacados pilotos de Il-2 Shturmovik que han existido, y un viejo conocido de quienes visitan este website. Iván Pstygo conoció a Baranov en profundidad, porque durante julio y agosto de 1942 eran los Yak-1 del 183º IAP quienes con frecuencia escoltaban a los Il-2 del 504º ShAP, donde Pstygo servía. De hecho sus respectivos regimientos estaban siempre en los mismos aeródromos, y los pilotos de Il-2 y Yak-1 solían almorzar y cenar juntos. Si hay alguien con derecho a hablar sobre Baranov, ese es Ptsygo.

 

Vencedor de Experten sobre Stalingrado

 

Un mes antes que ocurriera esta anécdota relatada por Ptsygo, con más exactitud el 28 de junio, Hitler lanzó la ofensiva que él creyó daría el golpe de gracia a la URSS, la Operación Blau. A las pocas semanas quedó claro para la STAVKA soviética cuales eran los objetivos de la ofensiva – tomar los pozos petrolíferos del Cáucaso, y ocupar la ciudad de Stalingrado sobre el río Volga. Si esto último ocurría, Hitler cortaría las comunicaciones fluviales y ferroviarias entre el Cáucaso y el resto de la Unión Soviética. Esto no podía permitirse: se debía detener o al menos ralentizar el avance el 6º Ejército de Von Paulus hacia Stalingrado. A partir del 17 de julio de 1942 ambos bandos desplegaron sus mejores efectivos aéreos en la zona de la curva del río Don– la Luftwaffe envió la mayoría de su Luftflotte 4 al mando de Wolfram Freiherr Von Richthofen, y la VVS todo el 8º VA de Timofey Jryukin, para apoyar la ofensiva y la defensa respectivamente.

 

Mijail, que en ese momento contaba con 10 victorias en su palmarés (ocho se pueden corroborar con los registros alemanes), volvió a mostrar sus mortales capacidades desde el principio. Y no lo hizo contra pilotos  inexpertos, sino contra adversarios tan habilidosos como él. La Luftflotte 4 incluía a unidades de caza tan renombradas como toda la JG 3 Udet y el I./JG 53 Pik As, y al ala de ataque StG 2 Immelmann, equipada con los tan mentados Ju.87D Stuka. Esos serían los duros adversarios de cada dia para la 269ª IAD del 8º VA, en la cual estaba asignado el 183º IAP del ya Starshiy Leytenant Mijail Baranov.

 

 

Mijail Baranov despega en su Yak-1 “Blanco 1” para una nueva misión en el verano de 1942. En ese momento Boris Safonov (que desgraciadamente había desaparecido en acción en mayo) y Mijail Baranov estaban entre los mejores pilotos soviéticos de la Gran Guerra Patria.

 

El 22 de julio todos los Il-2 de la 226ª ShAD fueron enviados a atacar las columnas de camiones y vehículos acorazados del 6º Ejército de Friedrich Von Paulus, y los Shturmovik cumplieron su tarea a la perfección, Esto en parte fue gracias a la excelente escolta provista por el 183º IAP de Baranov, que mantuvo a los “Messer” a raya, dejando a los Ilyushin hacer su trabajo. Una vez más Mijail Baranov mostró su maestría a los mandos del Yak-1, abatiendo un Bf.109F-4 cuyo piloto no era ningún novato, sino el Feldwebel Ernst Pröske, un experte que contaba con 14 victorias en su haber.

 

No solo la resistencia en el aire contra el avance nazi era feroz, en tierra el nuevo Frente de Stalingrado (el ex–Frente Sudooccidental) había podido crear una precaria línea defensiva en el río Chir, y estaba frenando al 6º Ejército. Por eso el 25 de julio Von Richthofen  envió a todos los Stuka de los I. y II./ StG 2 a atacar los puntos fuertes de las defensas soviéticas, escoltados por los habituales Messerschmitt pero también los Macchi MC.200 Saetta del 21º Gruppo Autonomo di Caccia. Los bombarderos en picado alemanes lograron su cometido, pero debieron pagar un precio alto cuando los Yak-1 del 183º IAP los interceptaron. En la subsiguiente lucha Mijail Baranov no soló obligó a la tripulación de uno de los Stuka a saltar de su aparato en llamas, sino que también dañó más allá de toda reparación posible a un MC.200 – el del Sottotenente Gino Lionello. El piloto del Ju.87D-3 derribado por Mijail resultó ser el propio Staffelkapitan del 4./StG 2, el Oberleutnant Martin Möbus, un Stuka-experte con cientos de misiones a sus espaldas, galardonado con la Ritterkreuz, y que resultó herido en la refriega.

 

 

Un mecánico del 183º IAP agrega una estrella más al Yak-1 “Blanco 1” de Mijail Baranov. Durante la última semana de julio de 1942 Baranov agregó ocho victorias más a su palmarés – cuatro Bf.109, dos Ju.87, un MC.200 y un Fi.156. La mitad de ellas (dos “Messers”, un Stuka y el Storch) las obtuvo el día 27 de julio.

 

Dos días después, el 27 de julio de 1942, Mijail Baranov tuvo uno de sus jornadas más exitosas, ya que le fueron  acreditadas tres victorias – dos “Messers” y un Stuka. Estas ocurrieron cuando el 183º IAP interceptó un grupo de Ju.87 del II./StG 2 escoltados por Bf.109 del III./JG 3. En la meleé que sucedió después Baranov de nuevo mostró sus habilidades – tras pocos minutos de combate aéreo dos Bf.109F-4 debían hacer sendos aterrizajes de panza luego de haber sido alcanzado por el certero fuego del as ruso. Y de nuevo uno de ellos era un experte – el Leutnant Wilhelm Lemke, con 36 victorias en su haber en ese momento, y que llegaría a reclamar 131. Cierto es que, de acuerdo a los registros alemanes, los daños sufridos por ambos cazas fueron relativamente leves (10% en el caso del aparato de Lemke, y 25% el otro). Pero debe hacerse notar que, de acuerdo a Christer Bergstrom, en ese período “la aguda falta de piezas de repuesto dejaba los aviones [alemanes] fuera de servicio despues de haber sufrido solo daños menores o fallas técnicas.”[i]  No contento son esto, Baranov abatió a continuación al Ju.87D-1 WkNr 2507 del Staffelkapitan del 6./StG 2, el Hauptmann Ernst Fick, matando al aviador germano (Fick sería galardonado con la Ritterkreuz a título póstumo). Como Baranov atacó a los Stuka “desde el sol” y abajo (para evitar el fuego de los artilleros traseros), ninguno de los otros pilotos vió que fue lo que derribó a Fick, e incorrectamente la Luftwaffe asumió que la causa había sido la antiaérea.

 

En realidad, ese día Baranov derribó un cuarto avión enemigo, el cual está confirmado por otros pilotos que observaron la victoria, y por los registros alemanes, pero por razones no claras no le fue oficialmente acreditado. El principal testigo presencial de este derribo no fue otro que Ivan Ivanovich Ptsygo.

 

Ivan I. Pstygo: “En una de las salidas, durante el camino de regreso desde el blanco hacia casa, se nos apareció un avión de enlace alemán Fi.156 Storch – en cierto modo parecido a nuestro Po-2. Nosotros decidimos derribarlo, e hicimos algunas pasadas, pero todas sin suerte. El Storch maniobraba y nos esquivaba. Baranov observó este cuadro y transmitió por radio:

 

-¡Jorobados, háganse a un lado, y miren como destrozo a esa basura!

 

Nos apartamos, y Mijail se lanzó al ataque y abrió fuego. Inmediatamente el Storch se encendió y ardió en tierra.”

 

Este aparato resultó ser el Feiseler Fi.156C-3 WkNr 5692, cuya desconocida tripulación pudo librarse de la muerte por los pelos. El aparato era reparable, pero la falta de repuestos mencionada anteriormente hizo que quedara fuera de servicio, y que se le diera de baja.

 

 

 

 

 

 

Tres destacados pilotos de la Luftwaffe. De izquierda a derecha: Oberleutnant Martin Möbus (comandante del 4./StG 2, Stuka experte), Leutnant Wilhelm Lemke (experte que reclamaría 131 victorias, 9./JG 3) y Leutnant Hans Roehrig (experte que reclamaría 75 victorias, 3./JG 53). Todos fueron abatidos por el as de Yak-1 Mijail Baranov (183º IAP, 269ª IAD) durante las fases iniciales de la batalla de Stalingrado, en los días 25 de julio, 27 de julio y 6 de agosto de 1942 respectivamente.

 

La racha exitosa de Mijail Baranov no paró allí: el 4 de agosto derribó un Ju.87D-3 del 1./StG 2, y al día siguiente dos Bf.109F-4, uno cada uno de su clasicos adversarios la JG 3 Udet y el Gruppe Pik As. Con estas tres victorias el palmarés del joven pero fogueado piloto ruso llegaba a 21. Todo quedaba así listo para el climax de la carrera de Baranov.

 

La Máxima Hazaña

 

El jueves 6 de agosto de 1942 comenzó como un típico día de verano, cálido y soleado. Mijail Baranov despegó, junto con otros dos pilotos de Yak-1 (el Leytenant Yudin y el Serzhant Savinov) para escoltar una vez más a sus viejos amigos, los pilotos de Il-2 del 504º ShAP. Cuando aún estaban sobre territorio amigo, sobre Abganerovo, sorpresivamente se encontraron con una formación de Stukas del 4./StG 2 escoltados por Messerschmitt del 3./JG 53, que se drigían a bombardear Kalach. Baranov escrutó rapidamente el cielo: no había otros cazas alemanes que representaran una amenaza inmediata para los Shturmovik. Por lo tanto no lo dudó  un segundo más y se lanzó al ataque.

 

Los cuatro “Messer” de escolta fueron tomados por sorpresa cuando los tres Yak-1 realizaron un ataque frontal contra ellos. Los proyectiles de cañon y ametralladora disparados por Mijail Baranov hicieron que el Bf.109G-2 WkNr 13480 explotara en llamas, obligando al Leutnant Hans Roehrig a saltar en paracaidas (este tenía ocho victorias en su haber, y reclamaría 75 victorias en total). A continuación dos de los Messerschmitt intentaron perseguir a Baranov, pero ambos Yudin y Savinov cubrieron a su líder y los obligaron a retirarse. Entretanto Baranov alcanzó a los Stuka y disparó una larga ráfaga contra el Ju.87D-3 WkNr 2293 del  Unteroffizer Herbert Oswald, incendiándolo. Al piloto teutón no le quedó otra opción que aterrizar de panza sobre territorio ocupado por tropas soviéticas, siendo él y su artillero inmediatamente capturados. Los restantes Stuka lanzaron su carga de bombas para poder escapar del ataque del as ruso.

 

 

Mijail Dmitrievich Baranov (183º IAP, 269ª IAD) posa feliz para la cámara en la cabina de su Yak-1, poco antes de su gran hazaña del 6 de agosto de 1942. Todos sus cuatro reclamos coinciden con verdaderas pérdidas de la Luftflotte 4: el Bf.109G-2 del experte Leutnant Hans Roehrig (3./JG 53), el Ju.87D-3 del Unteroffizer Herbert Oswald (4./StG 2, hecho prisionero), y dos Bf.109F-4 del JG 3. El último de estos fue derribado por medio de un “taran”, y su piloto –el Leutnant Karl Bergmann- falleció en la colisión.

 

Conseguido su objetivo de desarticular la formación de bombarderos en picado enemiga, los tres cazas Yakovlev regresaron con los Shturmovik que debían cuidar, a tiempo para ver que varios Messerschmitt de los I. y II./JG 3 se acercaban para atacarlos. Sin perder tiempo Mijail Baranov aceleró al máximo su Yak-1 “Blanco 1” para socorrer a sus compañeros del 504º ShAP, se colocó detrás del Bf.109F-4 WkNr 13215 y lo transformó en queso gruyere. El desconocido piloto germano de este aparato a duras penas alcanzó a llevarlo hasta su base, el aeródromo de Frolov, pero una vez allí se estrelló de panza, y se comprobó que era inútil intentar repararlo. Mientras tanto, Baranov observó que otro Messerschmitt intentaba llegar hasta los Il-2, y. sin perder tiempo se puso a distancia de disparo. Pero varios “clicks” le indicaron que se había quedado sin munición. Tras un segundo de duda tomó una decisión – se puso casi al lado del avión alemán, y con la punta de su ala le arrancó el timón de cola. El pudo a continuación saltar de su destruido Yakovlev, pero el piloto alemán –el Leutnant Karl Bergmann (Stab I./JG 3)- pereció al estrellarse su “Messer” – un letal Bf.109F-4/R1, armado con las terribles gondolas subalares de 20 mm.

 

Según la versión oficial soviética, mientras Baranov colgaba indefenso de su paracaídas, otro caza alemán le disparó, intentando matarlo. Afortunadamente para él, más Yak-1 de una unidad vecina, el 6º IAP, llegaron a la zona a ayudar a sus camaradas, y el piloto Ivan Serzhantov derribó a este Bf.109 y ahuyentó a los otros. Este reclamo no coincide con ninguna pérdida alemana admitida, sin embargo. El tema de pilotos disparando a sus oponentes derribados cuando caían en paracaidas es uno de los puntos más polémicos de la guerra aérea en el Frente Oriental. Ambos bandos se han hecho vehementes acusaciones de múltiples eventos de ese tipo, con el bando contrario negándolo casi con la misma vehemencia. En todo caso, si Baranov pudo ser salvado de morir ametrallado mientras caía, no salió inerme de su gran hazaña: una de sus piernas resultó gravemente herida, y esto le impidió volar nuevamente en forma inmediata.

 

 

Todos sus derribos durante ese verano, incluídos los cuatro del 6 de agosto de 1942, Mijail Baranov los obtuvo en este Yak-1, con la famosa inscripción ‘Groza fashistov M. D. Baranov’ = ‘El Terror de los Nazis Mijail D. Baranov’. (Ilustración por Claes Sundin, libro “Black Cross – Red Star. Air War over the Eastern Front. Volume 3”, página 23).

 

Los logros de Baranov son impresionantes cuantitava y cualitativamente. No fue solo la cantidad de sus presas, sino la calidad de estas – cuatro de los pilotos de Bf.109 que abatió eran consumados ases, y dos de las tripulaciones de Stuka eran condecoradísimos oficiales que tenían cientos de misiones de ataque (y por ende una vasta experiencia) a sus espaldas. Además, supo inspirar en los hombres de su regimiento una agresividad y un aprecio por las tácticas de combate aéreo que rinderon frutos. Esto se evidenció en los resultados: entre el 1º de julio y el 8 de agosto de 1942 todos los cinco regimientos de la 269ª IAD reclamaron derribar 67 aviones enemigos – y de estos 35 lo fueron a manos del 183º IAP. O sea que su regimiento solo se anotó más de la mitad de las victorias de toda la división, más que todos los otros cuatro regimientos juntos. En el lado negativo el 183º IAP perdió en ese mismo período 12 Yak-1 (toda la división perdió 47 Yakovlevs y LaGGs en ese lapso de tiempo). [i]

 

Por esto fuera poco, cuando las noticias de su hazaña se regaron por todas las unidades del 8º VA, esto significó un gran aliento para la moral de los pilotos. Mijail Baranov había demostrado a las claras que el derribar cuatro aviones enemigos en una sola misión no era una prerogativa de los Halte Asse teutones, y también que estos no eran superhombres, que con audacia y utilizando tácticas adecuadas podían ser derrotados.

 

Muerte Trágica

 

Tras una larga convalecencia debido a sus heridas, y varias sesiones fotográficas y tours para levantar la moral, finalmente se le permitió regresar a una unidad en el frente. Y lo hizo en el 9º GIAP. El nuevo comandante, Lev Lvovich Shestakov, estaba formando el regimiento intregramente con ases, y Mijail Baranov era una opción lógica para sumarse a las filas de esta unidad de la Guardia. Sin embargo Baranov nunca pudo volver a mostrar sus cualidades en combate: el 17 de enero de 1943, cuando probaba un Yak-1 recién llegado de la fábrica, tuvo que aterrizar por problemas en el avión (fallo del regulador de revoluciones R-7, según los documentos). Tras aterrizar, pidió permiso para despegar con otro avión y comenzó a efectuar figuras de alto pilotaje en la zona. A 3.000m de altitud hizo el viraje izquierdo, luego una revolución y rápidamente se puso en vuelo horizontal. El avión respondía bien a los mandos del experimentado aviador. De repente su avión volcó de nuevo patas arriba y a una velocidad creciente se fue en vertical hacia abajo. El caza chocó violentamente contra el congelado suelo y explotó de inmediato… La causa del suceso aun sigue siendo un misterio. Fue una triste final para un hombre que se había enfrentado a tan peligrosos adversarios, y sin embargo no solo había sobrevivido, sino que también los había derrotado, demostrando que realmente era el Terror de los Nazis.

 

Tabla Nº 1: Victorias de Mijail Dmitrievich Baranov

 

Fecha

Unidad VVS

Avión

Avion enemigo

Tripulación enemiga

Unid. en.

Comentarios

22.09.1941

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109

 

**

Novo-Avgustinovka

28.09.1941

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109

 

**

O de Novomoskvovsk

30.10.1941

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Hs.126B-1 WkNr 3457

Desconocida (40% dañ)

3.(H)/32

Según la LW, x AAA.

30.10.1941

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109E-7 WkNr 5269

Walter Höckner – MIA

6./JG 77

Sinyavka

30.10.1941

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Ju.88A-5 WkNr 4037

4 prisioneros

1./KG 77

 

02.11.1941

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Hs.126 WkNr 3186

A Siegel - WIA (50% dañ)

3.(H)/13

Dmtrievka

08.11.1941

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Hs.126B WkNr 3412

Desconocida (85% w/o)

1.(H)/23

Según la LW, x AAA.

08.11.1941

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109F-4 WkNr 7183

Kurt Schade

III./JG 52

Experte con 27 victorias.

24.12.1941

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Ju.88A-5 WkNr 3122

4 MIA

Wekusta 7

Cherkaskoye. Mariyupol

17.02.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Hs.126 WkNr 4072

Piloto WIA (80% w/o)

5.(H)/32

Según la LW, x accidente

22.07.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109F-4 WkNr 10209

Ernst Pöske – KIA

II./JG 3

Experte con 14 victorias.

24.07.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109

 

**

Plentovskiy

25.07.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Ju.87D-3 WkNr 2280

Martin Möbus – WIA

4./StG 2

Stuka-experte, RK.

25.07.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Macchi MC.200

Gino Lionello (w/o) – WIA

21 Gruppo

Volodinskiy

27.07.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109F-4 WkNr 13050

Desconocida (25% dañ)

8./JG 3

Según la LW, x accidente.

27.07.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109F-4 WkNr ?

Wilhelm Lemke (10% dañ)

9./JG 3

Experte con 36 victorias.

27.07.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Ju.87D-1 WkNr 2507

Ernst Fick – KIA

6./StG 2

Stuka-experte, RK. x AAA

27.07.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Fi.156C-3 WkNr 5692

Desconocida (20% dañ)

I./JG 53

No oficialmente acreditada

04.08.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Ju.87D-1 WkNr 2944

Alfred Philipp

1./StG 2

Según la LW, x AAA.

05.08.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109G-2 WkNr 14163

Desconocida (20% dañ)

I./JG 53

SO de Abganerovo

05.08.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109F-4 WkNr 10233

Maximilian Seidler – WIA

6./JG 3

Según la LW, x accidente

06.08.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109G-2 WkNr 13480

Hans Roehrig

3./JG 53

Experte que reclamaría 75 vict.

06.08.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Ju.87D-3 WkNr 2293

Herbert Oswald – POW

4./StG 2

Abganerovko. Stalingrado

06.08.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109F-4 WkNr 13215

Desconocida (65% w/o)

5./JG 3

Según la LW, x accidente.

06.08.1942

183 IAP, 269 IAD

Yak-1

Bf.109F-4/R1 WkNr 13385

Karl Bergmann – KIA

I./JG 3

Abganerovko. Stalingrado

 

Las entradas en rojo indican pérdidas que la Luftwaffe atribuye a una causa distinta que el combate aéreo.

 

Las entradas en azul indican victorias que no fueron oficialmente acreditadas a Baranov, pero que los testimonios  de otros pilotos confirman, y además son admitidas por la Luftwaffe.

 


 

Fuentes:

 

·         Dmitriy Yakovlevich Zilmanovich, “Íà êðûëüÿõ Ðîäèíû” (Na krylyaj Rodiny = Bajo las alas de la Patria)  Alma-Ata, Jalyn, 1985 (http://militera.lib.ru/bio/zilmanovich_dj/index.html, en ruso)

o  Biografía de Mijail D. Baranov (http://militera.lib.ru/bio/zilmanovich_dj/13.html, en ruso)

·         Mijail Yurevich Bykov, “Àñû Âåëèêîé Îòå÷åñòâåííîé Âîéíû: Ñàìèå ðåñóëòàòèâíûå ë¸ò÷èêè 1941-1945 ãã.” (Asy Velikoy Otechestvennoy Voyny. Samye resultativnye liotchiki 1941-45 gg = “Ases de la Gran Guerra Patria. Pilotos con los mejores resultados 1941-45”),  Editorial Yauza-EKSMO, Moscú, 2008 – Cortesía de Torero.

·         Biografías on-line de ases soviéticos en el sitio web “Soviet Fighter Aces of 1936-1953”:

o        Biografía de de Mijail Dmitryevich Baranov (http://airaces.narod.ru/all1/baran_md.htm, en ruso)

·         Christer Bergstrom, Andrey Dikov & Vlad Antipov, Black Cross – Red Star. Air War over the Eastern Front. Volume 3. Everything for Stalingrad. Eagle Editions Ltd., 2006.

·         Prien, Jochen - Stemmer, Gerhard - Rodeike, Peter - Bock, Winfried: Die Jagdfliegerverbände der Deutschen Luftwaffe 1934 bis 1945 - Teil 6 Tielband I Unternehmen "Barbarossa" Einsatz im Osten 22.6. bis 05.12.1941, Struve Druck 2003. – Cortesía de Jan Safarik.

·         Prien, Jochen - Stemmer, Gerhard - Rodeike, Peter - Bock, Winfried: Die Jagdfliegerverbände der Deutschen Luftwaffe 1934 bis 1945 - Teil 9 Tielband II Wom Sommerfeldzug 1942 bis zur Niederlage von Stalingrad 1.5.1942 bis 3.2.1943, Struve Druck 2006. – Cortesía de Jan Safarik.

·         Lista de pérdidas de la Luftwaffe:

o        http://www.airwar.ru/history/av2ww/axis/luftloss/luftloss21-31-10-41.html

·         Biografías on-line de ases y pilotos de la Luftwaffe:

 

[i] Christer Bergstrom, Andrey Dikov & Vlad Antipov, Black Cross – Red Star. Air War over the Eastern Front. Volume 3. Everything for Stalingrad. Eagle Editions Ltd., 2006. Chapter 4, página 47.

 

Escrito por Diego Zampini

 

 

 

 

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