Mijail Vasilyevich Avdeyev: el Águila de Sebastopol

Escrito por Diego Zampini

Retrato de Mijail Vasilyevich Adveyev, en el que luce con orgullo

su bien merecida Zolotaya Svezda, que le confirió el título de

Geroy Sovietskogo Soyuza (GSS) el 14 de junio de 1942.

En la Ciudad Heróica de Sebastopol encontró la Wehrmacht una nuez muy dura de cascar, que durante ocho meses drenó hombres y material bélico que las ambiciones de Hitler necesitaban en otras partes del vasto frente oriental. Uno de sus heróicos defensores fue al aviador naval Mijail Vasilyevich Avdeyev. Sin poder exhibir los astrónomicos palmareses de sus oponentes -los ‘experten’ de la JG 77- Mijail Avdeyev demostró que podía derrotar a cualquiera de ellos, aún en combates desiguales en condiciones adversas.

El 15 de septiembre de 1913 presenció el nacimiento de Mijail Avdeyev en la aldea bielorusa de Gorodetsk. Interesante es notar que en su partida de nacimiento la fecha que aparece es el 2 de septiembre. Esto es así porque Rusia aún utilizaba el viejo calendario juliano, y no adoptaría el gregoriano hasta 4 años más tarde.

Como muchos de los aviadores y militares de su época, sus padres eran humildes campesinos. Con grandes sacrificios, en 1931 –cuando Misha tenía 18 años- pudieron enviarlo a estudiar a Leningrado. Al año siguiente se hizo miembro de la Komsomol (KOMmunisticheskiy SOyuz MOLodiozhi = Unión Comunista de Jóvenes) y del DOSAAF (Comunidad Voluntaria de Colaboración con el Ejército, la Aviación y la Flota), y toma clases de planeador y vuelo en los aerocubles de la capital cultural de la nueva URSS. Como uno de los tantos hijos de la Revolución de 1917, merced a su habilidad se le daría la chance de ingresar a la Escuela Teórico-Militar de Leningrado (una oportunidad que en la Rusia Zarista posiblemente le hubiera estado vedada por su origen humilde) y en 1934 se recibe de piloto en la Escuela Militar de Pilotos en Voroshilovgrad. Ese mismo año comienza a servir como piloto en la VVS ChF (Voyenno Vozdushnye Sily Chernomorskogo Flota – Fuerzas Aéreas Militares de la Flota del Mar Negro).

Experiencia Valiosa

Durante los siete años que transcurrieron antes del comienzo de la Gran Guerra Patria en 1941, Mijail Avdeyev voló en casi todos los tipos de cazas soviéticos de fines de los años 30 – los Polikarpov I-15bis,  I-153 Chaika e I-16 Ishak. Domar a esta última temperamental montura, diseño de Nikolay Polikarpov, era todo un logro – si han leeido en este mismo website las entrevistas a Nikolay Golodnikov y Ivan Kozhemyako (y si no lo han hecho los invito a hacerlo), recordarán que ellos enfatizaban el hecho que al Ishak “…no se lo podía tutear, siempre había que tratarlo de usted” por lo exigente que era para volarlo. Como un solo hombre, todos los veteranos que iniciaron sus carreras militares en el I-16 coinciden en lo mismo – si aprendías a volar en la Mula (eso es lo que Ishak significa en ruso), luego podías aprender a volar en cualquier otro tipo de avión.

Y eso fue exactamente lo que le ocurrió al ya Starshiy Leitenant Mijail Avdeyev cuando fue elegido a fines de 1940 para ser uno de los primeros en volar uno de los cazas de nuevo tipo – el Yakovlev Yak-1. Habiendo dominado el vuelo en la Mula a la perfección, en poco tiempo ya era un maestro en el manejo del legendario caza diseñado por Aleksandr Yakovlev.

El Kapitan Mijail Adveyev en la cabina de su Yak-1 en Sebastopol, verano de 1941.

Con el Yak-1 Avdeyev consiguió la mayoría de sus victorias (19 de 22).

La primera de ellas fue el Bf.109E-7 del Unteroffizier Julius Ditte (4./JG 77, hecho prisionero)

el 20 de septiembre de 1941, cuando Mijail Vasilyevich era Starshiy Leitenant

y servía en la 5ª AE, 32º IAP ChF.

Comienza la Guerra Patria. Despliegue en Crimea

Para cuando comenzó la Gran Guerra Patria a fines de junio de 1941, Avdeyev era el zamkomesk (ZAMestítel KOMandíra ESKadrílii = sub-comandante de escuadrilla) de la 5ª AE del 32º IAP, 62ª IABr de la VVS ChF, estacionada en Crimea. Su regimiento (el 32º IAP) estaba equipado con una mezcla de los viejos I-15bis, I-153, I-16 y algunos nuevos MiG-3 (la mayoria de los cuales se encontraban empaquetados en los contenedores de transporte al comienzo de al guerra). La 62ª IABr (Brigada de Caza), a la que él regimiento pertenecía, comprendía un segundo regimiento de caza , el 8º IAP, equipado en su totalidad con los viejos cazas de Polikarpov.

Mapa de la península de Crimea, donde Avdeyev y sus compañeros tuvieron de librar sus combates más duros.

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A consecuencia del comienzo de las hostilidades se reciben nuevos aviones y refuerzos desde el Cáucaso. Entre los primeros se cuentan cazas de los nuevos tipos – 40 Yak-1 y siete LaGG-3. De los Yaks una docena de ejemplares iran a la 5ª AE del 32º IAP (las restantes cuatro seguiran equipadas con I-16, I-153 y MiG-3).

Entre los segundos se cuenta un regimiento naval, el 9º IAP. Este último, junto con el 8º IAP y la 46ª OShAE (Otdielnaya Shturmovaya Aviatsionaya Eskadrylya = Escuadrilla Indpendiente de Aviación de Asalto), que contaba con 4 IL-2 en servicio y 5 estropeados, fueron enviados a Odessa a resistir el avance alemán entre mediados de agosto y principios de septiembre, sufriéndo fuertes pérdidas a manos de la Luftwaffe allí. A consecuencia de estas pérdidas, y de que el 11º Ejército de Erich Von Manstein se encontraba ya a las puertas de itsmo de Perekop, la puerta de entrada a Crimea, es que se reorganiza el despliegue soviético en Crimea, y se reciben nuevas unidades como refuerzos. En primer lugar se crea el Fraydorfskaya Gruppa (Grupo de Fraydorf, llamado así por que su alto mando operaba desde ese aeródromo, cercano a Eupatoria) La unidad de Avdeyev, la 5ª AE del 32º IAP, es asignada a este Grupo. En segundo lugar se reciben como refuerzos a seis regimientos de la VVS que brindarán apoyo cercano al 51º Ejército (las tropas encargadas de cerrarle el paso en Perekop a las fuerzas alemanas). Estos regimientos son: tres de caza (los 182º, 247º y 253º IAP, equipados con MiG-3 el primero y LaGG-3 los restantes), dos de bombardeo (el 21º DBAP con Ilyushin DB-3F y el 507º BAP con Petlyakov Pe-2) y uno de asalto (el 103º ShAP). Quedaba así preparado el escenario para el comienzo de la batalla por Crimea, y del espectacular desempeño militar de Avdeyev.

Primera Víctoria

En Perekop y la granja colectiva “Chervonnyy Chaban” durante la mañana del 20 de septiembre el 51º Ejército aguantó la embestida de las fuerzas germanas. Parte del éxito en resistir se debió al excelente apoyo brindado por el Fraydorfskaya Gruppa (Grupo Aéreo de Fraydorf) y los bombarderos del 5º VA. Pero siendo la mayoría de estos pilotos novatos y/o volando lentos biplanos I-153 y I-15bis, y teniendo enfrente a adversarios experimentados comos los experten de la JG 77, desgraciadamente las pérdidas serían elevadas a lo largo de la batalla. Ese día el Grupo de Fraydorf escapó sin pérdidas ese día, pero la VVS del 51º Ejército perdió cinco aeronaves a manos de los Bf.109E germanos – un DB-3F, un MiG-3 y tres LaGG-3.

No obstante, debe aquí señalarse que la cantidad de victorias reclamadas por los alemanes fue de 10, duplicando la cantidad real de pérdidas soviéticas. Además, no todo fueron rosas para la Luftwaffe durante este combate – a los mandos de su LaGG-3 el experimentado veterano de la Guerra Civil Española Mayor Mijail Andreyevich Fedoseyev (247º IAP) transformó al Bf.109E-7 del experte Oberleutnant Ernst Bauer (14 victorias, II./JG 77) en su segunda víctima de la Gran Guerra Patria. Y una segunda pérdida germana ocurriría durante la tarde de ese 20 de septiembre de 1941 – la primera victoria de Mijail Avdeyev.

Un par de Messerschmitt aparecieron sobre Tagayly, desde donde operaba la 5ª AE, 32º IAP. Los dos aviadores alemanes impunemente volaron alrededor del aeródromo durante un largo rato, principalmente con la intención de efectuar un reconocimiento, pero también con la intención de sorprender a cualquier incauto piloto ruso que estuviera por aterrizar, o que se atreviera a despegar – la típica táctica alemana de la freie jagd (caza libre).

Mijail Avdeyev saluda a los mecánicos de su Yak-1, justo antes de despegar para otra misión en junio de 1942. Durante ese mes Avdeyev reclamó derribar seis aviones alemanes, de los cuales cuatro estan admitidos – un Bf.109F-4 del 8./JG 77 el 3 de junio, un He.111H-6 del 1./KG 100 el 5 de junio, otro Bf.109F-4 el 7 de junio (el del experte Wolfgang Verhagen) y finalmente el Bf.109F-4 de Gordon Gollob el 9 de junio de 1942.

Con lo que no contaron los aviadores germanos fue con que dos de los Yak-1 de la unidad contaban con equipo completo de radio (transmisor y receptor), unos de los primeros en toda la ChF. Estos estaban asignados al komesk Kapitan Ivan Lyubimov, y a su zamkomesk Avdeyev. Y Lyubimov decidió tenderle una trampa a los alemanes: despegar junto con su numeral y ofrecerse como una carnada tentadora, con Avdeyev siguiéndolos furtivamente a una distancia segura. Cuando los germanos picaran el anzuelo, allí estaría Avdeyev para cubrirlo. Al poder mantener comunicación radial todo el tiempo, Lyubimov y Avdyev podrían coordinar esfuerzos y decidir mejor cuando cerrar la trampa. El propio Mijail Avdeyev cuenta que sucedió:

Starshiy Leitenant Mijail V. Avdeyev: “Lyubimov hizo una señal con su mano. Su motor comenzó a aullar en una nota extrema, y la máquina desde su área de estacionamiento arrancó para despegar. A su derecha y un poco más atrás, se colocó mi avión, no sintiendo ya la tierra por debajo. Fuimos hacia arriba en espiral. El enemigo estaba cerca, a menos de 1.500m de altitud. Lyubimov actuaba así, para no aparecer frente a sus narices, y para no pasar de largo. Él temía que los alemanes, aprovechando su ventaja en altura y velocidad, entren al combate antes de que nosotros alcanzaramos la misma altura que ellos.

Pero los alemanes por alguna razón no se lanzaron al combate. Ellos permanecieron girando sobre el aeródoromo – evidentemente eran aviones de reconocimiento, espiando la disposición de nuestros aviones en el aeródromo, para luego enviar allí a sus bombarderos en picado.

Cerca de Lyuimov estaba su numeral. Ganando altura el Capitán, forzando el motor, se dirigió hacia el amarillo vientre del ‘flaco’ (Así nuestros pilotos apodaban al Messerschmitt por su fino fuselaje) y le disparó una afortunada ráfaga. Posteriormente, saliendo del ataque por detrás y por encima del avión atacado, se lanzó, acelerando rápidamente, sobre el segunudo caza enemigo [numeral alemán] el cual iba bajando y por alguna razón sin sospechar nada. El caza dañado por Lyubimov humeaba. No habiendo divisado detrás suyo a mi aparato, él comenzó a colocarse a la cola del komesk, pero yo me adelanté a su ráfaga.

El humeante Messerschmitt estalló en llamas. En ese mismo instante el líder atacado por Lyubimov bruscamente arrojó su máquina hacia abajo, advirtiendo del peligro a su numeral ya en llamas.

Me fui de lado hacia el ardiente Me.109, que perdía altura, esperando el momento cuando el fascista abriría la cubierta de la cabina y se arrojaría en paracaidas. Pero para mi sorpresa dos manos con facilidad arrojaron la cubierta hacia babor, levantando un poco el morro del aparato, e inmediatamente bruscamente inclinando la palanca de mando hacia delante. Desde la cabina saltó de lado el gris, delgado y largo uniforme del piloto. Presurosamente abrió el paracaídas.

El Messerschmitt se extinguió dos kilómetros al norte de nuestro aeródromo. No lejos de su avión aterrizó el piloto. De mirar más a este descabalgado as no tuve tiempo – el segundo huia sin poder ser castigado.”

Inmediatamente después de aterrizar Mijail Avdeyev fue -junto con Lyubimov, el Komissar Ivan Nych, el técnico de la escuadrilla Serzhant Bugayev, el chofer y dos soldados- a investigar los restos del Bf.109E-7. Mientras lo hacían se acercó un starik (anciano), que les mostró a los soldados el escondite del piloto adversario. Este se rindió y fue llevado frente a Avdeyev y sus compañeros. A continuación transcribo el encuentro, tal como es recordado por Mijail Vasilyevich en sus memorias:

Nych casi se cae al bajar del vehículo, y largó una sarta de insultos.

-Ah, tú viejo diablo –riñó- Bueno, hete aquí, que tenemos la ‘nueva información’.

-No disparen. Ich bin der Arbeiter. Prisionero. Ich bin der Arbeiter. Prisionero. No disparen. – repitió el alemán.

Al prisionero en uniforme gris lo mirábamos detenidamente y con curiosidad. Era joven. Tenía una cruz de hierro en el cuello. Sus ojos estaban fijos en las carabinas que llevaban los rusos en sus manos.

-Corre la liebre el canalla –dijo Bugayev- Pensó que le ibamos a disparar.

El fascista se puso pálido. Las manos le comenzaron a temblar.

-Ich bin nicht deutsch! -susurró él- Ich bin osterreicher. Ich bin osterreicher.

-Parece que se cagó en los pantalones – comentó Bugayev.

Todos nos hechamos a reir.

-El dijo, que él mismo es un obrero –aclaró Nych- Que ha caido prisionero. Él no es alemán, sino austríaco. Quítenle el arma.

Bulayev tomó, junto con el cinturón del prisionero, la funda de la pistola, extrayendo de esta una Parabellum cromada.

-Miren esta cosita –dijo él en tono de conocedor de armas- aparentemente está hecha a pedido. Tiene algo escrito. –Bugayev le pasó la pistola a Nych-  Lea, camarada comisario.

Nych miró la inscripción en el mango de la pistola, y tradujo que esta le fue otorgada al piloto Julius Ditte por servicios especiales durante la toma de la isla de Creta.

Otra arma al prisionero no le encontramos. Lo mandámos al estado mayor del Grupo. Bulayev se llevó la cubierta de la cabina con 3 impactos de bala.

-Con esto fabricaremos un buen portacigarrillos, - dijo el chofer.

-¿Portacigarrillos?- dijo Bugaev. No. Lo enseñaremos a pilotos. Para que vean que la cubierta de la cabina del Messer no esta blindada.

El piloto abatido por Mijail Avdeyev resultó ser el Unteroffizier Julius Ditte, del 4./JG 77 (hasta lo que puede saberse, no tenía victorias en su palmarés). Llevado frente al General-Mayor Vasiliy V. Yermachenkov (subcomandante de la VVS ChF), el piloto austríaco brindó información valiosa sobre la disposición de los Bf.109E en la base aérea de Chaplinka (no lejos de Perekop), y de que cada día al mediodía llegaban aviones de carga Ju.52/3m para abastecer a los cazas del combustible necesario para las misiones del día. Con esta información se montó un ataque aéreo contra Chaplinka el 21 de septiembre (en el cual Avdyeyv participó en el grupo de escolta). Desgraciadamente Julius Ditte falleció mientras estaba en cautiverio.

Debe aquí notarse que tanto Avdeyev como Konstantin D. Denisov (otro destacado as soviético que luchó en Crimea) en sus memorias dicen que este episodio ocurrió el 20 de septiembre. Sin embargo, por alguna razón desconocida, tanto los registros de pérdidas de la Luftwaffe como los documentos de la VVS ChF mencionan que Ditte fue derribado por Avdeyev el 30 de septiembre.

Choque de Titanes por Partida Doble

El 24 de septiembre de 1941 la misión de Avdeyev era escoltar a los I-15bis de la 3ª AE/8º IAP a que realizaran su ataque sobre las posiciones alemanas en la granja colectiva “Chervonnyy Chaban”. El grupo de escolta consistía en cuatro Yak-1 (Mijail Avdeyev era el líder y Grigoriy Filatov su numeral) y cinco I-16. Así recordó el propio Mijail Vasilyevich el duro combate:

Starshiy Leitenant Mijail V. Avdeyev: “Nuestra ‘chetviorka’[1]volaba dos-tres minutos por delante de los grupos de cazabombardeo y daba cobertura hacia la intersección de las líneas del frente. Cuando todavía estábamos en tierra habíamos acordado que el Teniente Shcheglov y el Sargento Nikolayev se mantendrían cerca del golfo de Karkinitskiy a una altura de entre 2.000 y 2.500 metros, mientras que yo con Filatov lo haríamos 500-800 metros más alto y hacia el este.

Sobre la granja gubernamental ‘Chervonny Chaban’ y 300 metros más arriba que nosotros se mostraron los Messerschmitt. Doce en total. Si hubieramos mantenido el curso hacia el este hubiera sido pasar de lado, para que no nos divisaran. Pero eso facilmente los llevaría allí donde estaban los cazabombarderos.

Entramos en combate juntos – la pareja de Shcheglov patrullaba sobre el sitio de paso del grupo. Inmediatamente decidimos – lo principal era hacer entrar al enemigo en batalla, retenerlo, darle la oportunidad a nuestros cazabombarderos a cumplir todo lo planeado en la operación ‘Chaplinka’, y después… Después, cuando los nuestros regresaran con la victoria, de alguna manera elegiríamos.

De todas maneras elegir no pudimos. Los alemanes vieron, que los rusos eramos dos en total contra doce. Nos aceptaron como fáciles presas y cada uno de ellos se abalanzó para aprovecharse primero.

¡Caras les costaron las ‘fáciles’ presas, hijos de perra de vientre amarillo! Nosotros eramos solo dos, pero ustedes aún no saben, como se transforma un piloto ruso en el aire.

El combate se desarrolló en completa confusión y atacándonos los unos contra los otros. Frente a mis ojos aparecían y desaparecían las colas, los vientres amarillos de los Me.109, las humeantes y luminosas trazadoras de las balas. Detrás de los Yak  y los Messerschmitt los signos de identificación no eran visibles, y nadie decidía eludir el combate. La confusión lo cubría todo. Filatov miraba a su cola en todo momento. A veces parecía que su cabeza daba una vuelta completa. Él a duras penas logró mantenerse al lado mío durante varias maniobras bruscas e inesperadas, y durante los ataques del enemigo.

¿Cuanto duró este juego con la muerte ‘abrazados’ a doce buitres enemigos?Entonces pareció eterno…

No hete aquí que, al fín, vimos como nuestros cazabombarderos regresaban. No nos dio tiempo a contarlos. Detrás seguía el gurpo de cobertura – los Yak. Quedaba claro – la misión se había completado, era necesario que nos desligáramos de los ‘Messer’, llegar hasta casa.

¿Pero acaso podíamos irnos así, sin castigar ni siquiera a uno de ellos? Y me arrojé hacía adelante. Después de cada ataque miraba atrás cuidadosamente – Filatov estaba vivo, y habiéndolo visto, de nuevo me lancé sobre sobre el Messerschmitt más cercano. A uno de ellos me fue posible atraparlo un instante en el colimador y enviarle una ráfaga. El buitre se incendió y envuelto en llamas a la vista de todos salió del combate. Los alemanes todos juntos se zambulleron hacia abajo, como si se apresuraran a mirar a su último beso con el suelo. Decidimos no molestarlos.”

Avdeyev fue acreditado en realidad con dos “Messer”, seguidos por un tercero reclamado por su numeral Filatov, un cuarto por el Leitenant Mustafá Allajverdov, y un quinto por V. Y. Pastuj  (piloto de I-16). La Luftwaffe misma admite haber perdido tres Emils (Bf.109E) en ese combate, más un cuarto que fue dañado. Hoy se ha podido determinar que el “Messer” que Mijail Avdeyev puso en el colimador de su Yak-1 fue el Bf.109E-7 WkNr 3632 del Oberfeldwebel Eugen Wintergerst del 4./JG 77 (un as con 20 victorias en el Frente Oriental hasta ese momento). Wintergerst maniobró desesperadamente para evitar seguir siendo machacado por el fuego certero del piloto bieloruso, con la mala suerte que chocó en el aire con otro aparato alemán – el Bf.109E-4 WkNr 1459 de su compañero Leutnant Herwig Zuzic. Ambos pilotos se vieron obligados a saltar de sus malogrados aparatos, y fueron capturados por soldados soviéticos tan pronto como tocaron el suelo. De esa manera inesperada y fortuita Avdeyev transformó una victoria en dos. Lo interesante es que… ¡Zuzic también era un experte! (tenía 13 victorias en su palmarés personal al momento de caer prisionero).

El tercer “Messer” del II./JG 77 cayó a manos de Grigoriy Vasilyevich Filatov, y el Bf.109E reclamado por Mustafá Allajverdov parece haber sido el que la Luftwaffe admite como averiado. ¡Todo esto sin sufrir pérdidas! Los pilotos navales de la Flota del Mar Negro habían demostrado ser nueces muy duras de cascar. Y el Starshiy Leitenant Mijail Avdeyev no había dejado dudas que podía medirse de igual a igual con cualquier as adversario al convertir a dos experten en sus segunda y tercera victorias respectivamente.

Al día siguiente -25 de septiembre- los bombarderos soviéticos Pe-2 del 507º BAP continuaron haciendo su mejor esfuerzo para contener a la Blitzkrieg germana. Y los Petlyakov cumplieron su misión con mucho éxito: Primero a las 13:24 hs una pareja de Pe-2 detuvieron el avance alemán en “Chervonnyy Chaban”, y seis minutos después otros tres Petlyakov destruyeron una batería de artillería enemiga en Vtoro-Konstantinovka. Su escolta –una docena de I-16 y el para (pareja en ruso) de Yak-1 líderado por Avdeyev con Platonov como su numeral- también fue muy exitosa, ya que no solo impidieron que 44 cazas alemanes molestaran a los bombarderos, sino que incluso derribaron un Bf.109 ¡sin sufrir pérdidas! Fue la cuarta victoria de Avdeyev:

Starshiy Leitenant Mijail V. Avdeyev: “No puedo decir, que ese día fuera especial, y sin embargo lo recordaré toda la vida.  La Guerra, como un insaciable Moloch, ya hacía tres meses que demolía todo a su paso. […] El enemigo, después de una fuerte preparación artillera y un masivo ablandamiento con la aviación, movió sus fuerzas principales hacia el ‘Turetsky Val’[2],  apoyándolas sin cesar con la artillería  y la aviación.

Nuestros aviones no conocieron descanso: todos nosotros una y otra vez al día los llevábamos al cielo. Hete aquí que hoy seis veces volamos misiones. Desde el principio Lyubimov comandaba un gran grupo, luego las tareas eran cada vez más complicadas, tuvimos que separarnos en dos ‘shestiorki’[3], y para el fin del día, despegamos tres ‘chertviorki (cuartetos)’. Esto resultó peor que un único grupo grande.

Nuestra ‘chetviorka’ de cazas escortó a los bombarderos a Sivashi. La pareja de cobertura directa se estableció cerca de los Petlyakov, mientras yo con el Sargento Platonov estábamos más alto y nos colocamos un poco más adelante para explorar el aire en la zona del objetivo.

La exploración no duró muchó: aún desde lejos vimos un enjambre completo de cazas alemanes. Contamos cuarenta y cuatro Messerschmitt… Si semejante armada se lanzaba sobre nuestros bombarderos, entonces a casa no iba a regresar ni uno. Y una pareja de Yak (se refiere a grupo de escolta directa) también estará condenada  a una muerte segura.

Los alemanes aún no nos divisaban, aún hay algunos minutos salvadores. Es posible analizar todo, sopesar todo…

¡Un diablo! ¿Sobre qué pensar? ¿Qué sopesar – volvernos y dejar que esta jauría destroce a nuestros camaradas? ¡No! ¡Una vez más no! Nosotros junto con Filatov ya nos habiamos enfrentado recientemente contra doce ‘Messer’… Si, pero esta vez no tengo a mis espaldas a Filatov, sino al Sargento Platonov… Da lo mismo, otra salida no hay. Es necesario atraer la atención de los Messerschmitt sobre nosotros mismos. No todos se lanzarán sobre nosotros, pero por ahora aproximadamente una decena de ellos se enfrentan conmigo y Platonov, mientras los restantes se arromolinarán alrededor mientras que los Petlyakov podrán bombardear con éxito.

Así, hay que distraer con determinación, llevarlos a otro lado… Miro para atrás, balanceo con el avión. Platonov entendió todo. Los alemanes nos vieron. Y todos los cuarenta y cuatro se arrojaron …. Los atraímos hacia el este. Aún no caen sobre nosotros, pero los asquerosos cuerpos de vientre amarillo de los Me.109 ya están más alto, más bajo, a los costados y detrás nuestro.

¡Aguanta, Platonov! ¡Aguanta con fortaleza!  Mantente detrás de mi cola. Yo te enseñé a volar en el Yak! Así se vuela: y de manera inesperada para el enemigo bruscamente giré hacia la derecha y ataco al ‘Messer’ más cercano.

Todo se mezcló, todo se puso patas arriba en un instante: como si no hubiera ni tierra, ni cielo. Frente de mis ojos aparece un continuo carrusel, coloridas trazadoras de fuego. Con cada impacto el avión se sacude y traquetea, las manos se agarrotan sobre la palanca de mando y respaldo blindado del asiento parecia ya una lápida en mi tumba.

¿Estás vivo, Platanov? ¿Estás aquí conmigo, numeral mío? De semejante carnicería, cuando 44 te consideran una presa fácil, persiguen a dos, salir indemne es impensable. ¡Y el Sargento sabe acerca de esto! Interesantemente, tiene pocos años, es casi un niño…

Aguanta, muchacho, una vez más un giro, una vez más al ataque… ¡No vamos a ser una presa fácil para ellos! Hasta que se pueda, mientras tire el motor, y no toda la munición se haya disparado, mientras estamos vivos - ¡hacia delante!

Nuestros bombarderos ya, probablemente, atacaron al blanco y se encuentran ya lejos del frente. ¿Cuánto tiempo pasó? ¿Cuántas vidas puede vivir una persona en un instante?

Sorpresivamente una brillante llama se encendió enfrente y desde la derecha – el fuego lamió con avidez la cabina del Messerschmitt. Los fascistas se lanzaron en todas direcciones para esquivar la ráfaga. Desde ese momento ellos ya no intentaron volar tan descaradamente: evidentemente decidieron que el destino los hizo enfrentarse con unos verdaderos ases, tan cohesionada y tan dinámica era nuestra pareja. No les cabía en la mente que mi numeral, tenaz y valientemente realizó con virtuosidad todas las maniobras, recibiendo en realidad su bautismo de fuego.

¡Semejante bautismo sería un gran honor para cualquier piloto varón! He aquí que otro buitre más, arrastrando una gruesa estela negra yéndose hacia abajo como una piedra. Los alemanes, como siempre, como por una orden, obedientes como rabaño salieron del combate…

Al aeródromo volvimos por milagro – en mi avión contaron treinta y dos impactos, y no menos en el de Platonov.”

Al analizar las fuentes alemanes queda claro porque todos los alemanes rápidamente decidieron abandonar el combate tan pronto como Avdeyev derribó a ese Messerschmitt – este resultó ser el Bf.109E-7 de uno de sus líderes, el Hauptmann Von Witzthum del Stab (la escuadrilla de estado mayor) del II./JG 77, quién debió saltar de su aparato en llamas. Sin su líder para coordinarlos, con otro aparato averiado y viendo que las “fáciles presas” no eran tales, los restantes aviadores alemanes decidieron retirarse. La cifra de 44 “Messer” dada por Avdeyev parece un poco exagerada, pero sin duda al menos una veintena de cazas alemanes participaron de ese combate, con lo cual Avdeyev y Platonov estaban superados en número 10 a 1.

El piloto bieloruso reclamaría dos nuevas victorias (las cuales fueron confirmadas) el 30 de septiembre (en grupo) y el 18 de octubre (ambos Bf.109). Ninguna de estas hasta ahora se pueden confirmar en las listas de pérdidas alemanas. Ciertamente es probable que Mijail Vasilyevich haya en buena fé creído derribar a estos Messerschmitt pero que en realidad estos hayan recibido poco o ningún daño. También debe recordarse que las listas de pérdidas de la Luftwaffe no estan completas, y estos reclamos podrían confirmarse en el futuro.

Primer y Segundo Asalto a Sebastopol

Pero a pesar de los valientes esfuerzos de los soldados del 51º Ejército, la VVS y el Fraydorfskaya Gruppa, el másivo apoyo aéreo y artillero alemán finalmente rompió las defensas soviéticas a mediados de octubre, y rápidamente el 11º Ejército de Von Manstein ocupó toda Crimea. Pero al acercarse a Sebastopol las fuerzas nazis se encontraron con que esta sería sin duda dificil doblegar su resistencia – el Admiral Filipp Sergeyevich Oktyabrskiy había construido formidables defensas, y la Wehrmacht debió resignarse a establecer un sitio que mantendría al 11º Ejército ocupado por los restantes ocho meses.

El 11 de noviembre de 1941, tras casi dos semanas de ataques de tanteo y ablandamiento, el 11º Ejército alemán lanzó un asalto general contra Sebastopol, ataque que es conocido para los historiadores rusos como Perviy Shturm (Primer Asalto). Comenzaba a escribirse uno de los capítulos al mismo tiempo más gloriosos pero a su vez más trágicos de la Gran Guerra Patria. Tras diez días de infructuosos esfuerzos y cuantiosas pérdidas Erich Von Manstein debió detener el asalto.

Von Manstein pidió entonces al comandante del Fliegerkorps IV (Cuerpo Aéreo), General der Flieger Kurt Pflugbeil, que ablandara las defensas soviéticas desde el aire en anticipación de un Segundo Asalto. Las unidades que Pflugbeil destinó específicamente a atacar Sebastopol eran: Bombarderos – los III./KG 27 y III./KG 51 (100 bombarderos He.111 y Ju.88); Bombarderos en picado – los I. y III./StG 77 (60 Ju.87); Cazas – el III./JG 77 (40 Bf.109E), que había reemplazado al II. Gruppe; y aviones de reconocimiento – el 3.(F)/AGr 121 (10 aeronaves). Un total de 200 aviones de combate.

Por su parte la VVS ChF en Sebastopol reunió todas sus fuerzas en el 3º OAG (Otdelnaya Aviatsionaya Gruppa = Grupo Especial de Aviación) de la SOR (Sevastopolskiy Oboronitelniy Rayon – Región Defensiva de Sebastopol). Su principal componente era la 62ª IABr (compuesta por los 8º, 9º y 32º IAP), el 11º ShAP y la 2ª AE del 18º ShAP, más dos escuadrillas – la primera de hidroaviones de reconocimiento y rescate, y la segunda de biplanos de bombardeo nocturno. Esto significaba 137 aeronaves – 99 cazas, seis cazabombarderos, seis bombarderos nocturnos y 26 aviones de reconocimiento naval. Se redistribuyeron fuerzas, y varios pilotos cambiaron de unidad incluyendo al propio Mijail Avdeyev – fue designado komesk de la 1ª AE del 8º IAP.

A primera vista esto no parece significar un serio desbalance de fuerzas en el aspecto aéreo, e incluso una superioridad soviética en cazas. Pero debe notarse que solo 44 de estos 99 cazas eran de los tipos modernos (18 Yak-1, 17 MiG-3 y nueve LaGG-3), los restantes eran los viejos I-16 e I-153, con pocas o ninguna posibilidad de enfrentarse al Bf.109E alemán o a los bien blindados y armados He.111 y Ju.88. Ademas, muchos estaban fuera de servicio y no podian ser usados en combate.

M. Avdeyev, K. Alekseyev, M. Grib

A las 6:10 hs del 17 de diciembre de 1941 Von Manstein lanzó lo que los rusos conocen como Vtoroy Shturm (Segundo Asalto) contra Sebastopol, cuando la artillería alemana realizó una breve preparación,  y el 11º Ejército intentó perforar las defensas soviéticas en la zona del golfo del río Belbek. Las bases aéreas de la SOR también fueron atacadas – en dos ocasiones (7:40 y 8:20 hs) seis Ju.88 lanzaron alrededor de 50 bombas contra el aeródromo de Jersonesskiy Mayak, destruyendo una caponera, averiando un I-153 y causando bajas entre el personal de la base (un muerto y nueve heridos). Las siguientes incursiones no tuvieron éxito: Seis cazas Yak-1 del 1ªAE/8º IAP interceptaron a veinte Heinkels y Junkers, y su comandante derribó a uno de estos, tal como él lo recuerda:

Starshiy Leitenant Mijail V. Avdeyev: “Pronto regresaron de su misión los bimotores Petlyakov, la 5ª Escuadrilla ascendió al aire. Tras el aterrizaje de los Petlyakov aterrizaron los Shturmovik que regresaban junto a sus cazas de escolta, y justo en ese momento a Jersonesskiy Mayak se aproximaban unos veinte bombarderos alemanes, con un gurpo de cobertura. Como ya habáimos acordado en tierra, las parejas Avdeyev-Shilkin, Alekseyev-Babayev y Batolkin-Shelyakin se dirigieron al encuentro de los bombarderos. Su objetivo era romper la estrecha formacion en la que iban los bombarderos, a la cual no era posible ni acercarse. En lateral comenzó el ataque el cuarteto de MiG liderado por Kudymov; estos patrullaban la zona y cuando se les agotaba el tiempo estaban dispuestos a aterrizar, cuando aparecieron los alemanes. Las  parejas Ribalko-Kalinin y Danilko-Grib entraron en un carrusel con los Messerschmitt. La formación de los bombarderos quedó frustrada.

Alguien del cuarteto de Kudymov incendió un Ju.88 que cayó al mar. Yo le disparé a un Heinkel. Derribarlo fue posible solo a la  tercera pasada. Quise atacar a uno de los Junkers, que estaba arrojando sus bombas al mar, pero durante el ‘boevoy razvorot’[4] (giro de combate) me molestaron los Messerschmitt.”

Esta vez la victima de Avdyev puede confirmarse:  fue el Heinkel He.111H-6 WkNr 4526 del 9./KG 27, que debió hacer un aterrizaje de emergencia, y resultó con un 40% de daños, aunque su tripulación salió indemne. En la terminología alemana, ser averiado en un 40% significaba recibir un daño tan importante, que debía ser enviado a un taller de reparación a la retaguardia para que se le reemplazaran el 40% de sus piezas (operación que llevaba una semana al menos), y que una vez reconstruido volver a volar.

Fieros combates aéreos rugieron sobre Sebastopol los días 20, 21, 23 y 23 de diciembre, durante los cuales Mijail Vasilyevich no anotó victorias pero sus pilotos reclamaron unas once victorias aéreas (al menos seis están confirmadas por la Luftwaffe). Pero el 26 de diciembre de pronto las fuerzas germanas suspendieron sus ofensivas terrestres y aéreas. La razón es que ese día en Kerch, a las espaldas del 11º Ejército alemán, el 51º Ejército realizó un audaz desembarco, a lo que se unió el día 30 otro desembarco, el del 44º Ejército, en Feodosia. La situación se haría aún peor para los alemanes cuando 800 soldados de la morskaya pejota (infantería naval) desembarcó en Evpatoria el 5 de enero de 1942, apoyados por la población rusa local, que se alzó contra los alemanes. La amenaza que estas fuerzas representaban para las fuerzas de Von Manstein era tan grave, que este se vió obligado a discontinuar su asalto, y enviar las unidades del Fliegerkorps IV contra las fuerzas soviéticas en la península de Kerch.

Eso dio un respiro a los defensores de Sebastopol, incluyendo a los pilotos de Avdeyev. Sin embargo ocasionalmente los bombarderos regresaron a la fortaleza. El 9 de enero de 1942 varios Heinkel con escolta atacaron el aeródromo de Kacha al norte de Sebastopol. Pero allí estaban los pilotos de Yak-1 del ahora Kapitan Mijail Avdeyev para darles una “cálida bienvenida”.

Kapitan Mijail V. Avdeyev: “¡Mishka! ¡Mira a tu izquierda! ¡Izquierdaaaa!!!

El grito me golpea en los auriculares.

Miro precipitadamente a mi alrededor.

Parece que ya es tarde: desde el ‘Messer’ surgen hacia mí amarillos hilos de fuego. Con un seco crujido el plexiglas los engulle. El duraluminio canta y cruje, desgarrado por las balas.

Empujo la palanca de mando lejos de mí. Voy hacia abajo.

En un abrir y cerrar de ojos, cuando veo que, cubriéndo todo el cielo –así de cerca estaba- pasa la sombra de un avión con cruces negras en las alas.

No, parece que esta vez estoy vivo. Pruebo el avión. Parece que responde bien a los mandos.

No sé de donde al lado mío aparece el aparato de Grisha Filatov. Su cara sonríe con preplejidad.

-¡No pasó nada, amigo, aún estamos vivos!

¡Diablos! Los Junkers de nuevo pasan sobre el blanco. Probablemente creyeron que acabaron con nosotros.

-¡Grisha! Grisha! ¡Voy al ataque!

No sé si me escuchó o su intuición de piloto experimentado le dictó una decisión simultánea, miré un instante y ví como un hilo invisible ató a mi numeral a la cola de mi avión: tras un brusco lanzamiento hacia arriba él no me pierde, tal como esperaba sigue cubriéndome.

Significa, que todo esta en orden. Voy…

La mole del Junkers crecía continuamente, rápidas trazadoras de fuego venían a mi encuentro.

Cuando piensas, que si una de ellas golpea en la cabina –  estás muerto, entonces el frio se te mete en el corazón. Mienten aquellos escritores que afirman que hay gente sin nervios. Los pilotos no son robots, y lo más importante es vencer en sí mismo ese momento de impetuosidad. Lo más importante es que tus nervios se hagan más fuertes que los nervios del enemigo.

¡Epa! ¡Ellos han roto la formación! Esto ya está bien.

Me acerco al Junkers numeral que está a la izquierda. Presiono el gatillo.

Una vez. Una segunda. Una tercera.

No oigo ningun ruido, y comprendo que he acertado solo cuando lo sobrepaso: el humeante Junkers se va hacia tierra.

Subo en vertical. Filatov se aferra a un Junkers. ¡Buenísimo! ¡Con semejante numeral no puedes fallar! El alemán ‘de Filatov’ comienza a humear. Cae en la bahía.

Hago un giro. Miro – los alemanes lanzan sus bombas desordenadamente en el mar. Arrojo el avión hacia el aparato más cercano. Y horrorizado miro la aguja del combustible:apenas alcanza para regresar al aeródromo. Doy la orden de regresar…”

A los alemanes les solía ocurrir que, si un aparato desaparecía sin rastros, hasta que se interrogaba a todas las tripulaciones de los otros aviones del grupo para determinar su suerte, ya era la madrugada del día siguiente. En el caso de los aviones muy dañados, en ocasiones llevaba varios días determinar si el avión era reparable o no. Por eso suele haber uno o varios días de diferencia entre la fecha en que un piloto soviético reclamó un derribo y la fecha en que este figura en los registros alemanes de pérdidas. O las listas de perdidas alemanas simplemente estan incompletas.

El Junkers derribado por Avdeyev el 9 de enero –el Ju.88A-4 WkNr 4542- casi seguro corresponde al primer caso: cuando los mandos del II./KG 51 concluyeron que ninguno de sus compañeros vió que le sucedió, ya era más de medianoche, y por eso parece como perdido el 10 de enero (ese día la VVS ChF en Sebastopol no reclamó ninguna victoria).

Choque de Titanes III

Si bien forzado a detener sus ataques aéreos contra Sebastopol, el Fliegerkorps IV descargó toda su furia contra las tropas soviéticas en Evpatoria y Simferopol, y contra los buques que intentaban aprovisionarlas. Con este apoyo las tropas alemanas rechazaron el audaz ataque de los valientes infantes navales en Evpatoria (740 efectivos de desembarco táctico, cuyo propócito fue distraer a las fuerzas enemigas de Kerch y Feodosia, donde se hizo el principal desembarco; los alemanes los superaban en numero y en armas en más de 5 veces, contaban con el apoyo de aviación, de varias baterías de artillería y de carros de combate. El mal tiempo impedió enviar ayuda. Ellos cumplieron su mision, pero solo 40 sobrevivieron). Como acto de venganza, el 12 de enero los nazis asesinaron a sangre fría a unos 3.000 civiles de la ciudad que habían brindado asistencia a los infantes navales heridos. Los heridos tambien fueron fusilados. Luego el 18 desalojaron al 44º Ejército de Feodosia. Sin embargo la fiera resistencia soviética los obligó a detener la contraofensiva. En Sebastopol el mal tiempo que imperó sobre la ciudad durante las primeras tres semanas de enero (incluyendo terribles tormentas de nieve) impidió a la aviación de la SOR de intentar ayudar a sus camaradas en la península de Kerch.

Pero finalmente el 23 de enero de 1942 hubo buen tiempo y se organizó un ataque aéreo contra el depósito de abastecimientos principal del 11º Ejército en Simferopol. Los Pe-2 del 40º BAP ChF atacarían el deposito mientras los Yak-1 del 1ª AE/8º IAP les proveían cobertura. Casi sobre el objetivo fueron atacados por todo el 7./JG 77, pero pese a estar sobrepasados 2 a 1 en número, los Yakovlevs pudieron retener a los “Messer” alemanes ocupados, dejando que los Petlyakov concluyeran su misión exitosamente y sin bajas. El líder de la docena de Bf.109 era nada más ni nada menos que su Staffelkapitan, el Oberleutnant Wolf-Dietrich Huy, un galardonado con la Ritter Kreuz que contaba con 37 victorias en su haber hasta ese momento.

Oberleutnant Wolf-Dietrich Huy, Staffelkapitan del 7./JG 77, tenía 37 victorias en su haber y estaba

galardonado con la Ritterkreuz cuando, el 23 de enero de 1942, se enfrentó con los Yak-1 del 8º IAP ChF.

Una certera ráfaga de Mijail V. Avdyev lo obligó a realizar un aterrizaje de panza, resultando

en la destrucción del 40% de su Bf.109F-4 WkNr 8384. Enviado al norte de África, fue derribado

por Spitfires británicos y capturado cuando su palmarés era de 40.

El pequeño grupo de cazas soviéticos se dispusieron en forma de Oboronitelniy Krug (Circulo Defensivo), protegiéndose mutuamente sus vulnerables hemisferios traseros. Con tantas victorias en su haber, Huy se sentía confiado que esta táctica no le impediría aniquilar a estos molestos russkies y aumentar su palmarés. Por lo tanto se lanzó al ataque y se colocó a la cola del Starshiy Leitenant Konstantin Alekseyev. Pero con lo que no contó fue el Yak-1 que venía detrás era el del Kapitan Mijail Avdeyev. Instantes después el experte germano sintió en carne propia la extraordinaria puntería del as bieloruso:

Oberleutnant Wolf-Dietrich Huy: “Todo sucedió muy rápido. Antes de que yo tuviera tiempo de colocarme en posición para abrir fuego, otro caza soviético me disparó e impactó el motor, el cual se detuvo abruptamente, y comenzó a emitir humo.”

A Huy no le quedó más alternativa que realizar un aterrizaje de panza, del cual salió indemne, pero su aparato –el Bf.109F-4 WkNr 8384- resultó destruido en un 40%. La acción de Avdeyev no solo salvó a Kostya Alekseyev, sino que también le posibilitó a este último obtener una victoria – acribilló el Bf.109F-4 WkNr 7111, cuyo desconocido piloto también debió hacer un aterrizaje de emergencia en el aeródromo de Sarabuz, necesitando que se le reemplazaran el 25% de sus componentes. Como solía suceder en los combates en los que las cosas no les salían bien, ni bien comenzaron a sufrir pérdidas los restantes pilotos alemanes abandonaron el combate y se retiraron.

Si a esto se le suma el hecho que una gran cantidad de los petrechos militares del 11º Ejército alemán en Simferopol fueron destruidos, se ve que para los alemanes ese fue un día para olvidar. En reconocimiento a este y otros éxitos, y para premiar todos los esfuerzos del 8º IAP ChF en la defensa de Sebastopol, el 9 de abril la unidad fue galardonada con el título “de la Guardia”, y se convirtió en el 6º GIAP ChF.

Casi Verdugo de Erich Von Manstein

Feldmarschall  Erich Von Manstein, uno de los mejores estrategas de la Wehrmacht durante toda la 2GM.

El 3 de junio de 1942, cuando era Generaloberst y estaba al mando del 11º Ejército alemán, la lancha torpedera

italiana MAS donde viajaba fue ametrallada por los Yak1 de Mijail Avdyev y su numeral Stepan Danilko.

Murieron tres personas y otras tres fueron heridas, pero Von Manstein salió indemene.

El 3 de junio de 1942 Mijail Avdeyev y el Starshiy Leitenant Stepan Danilko realizaban una salida de reconocimiento sobre el camino entre Sebastopol y Yalta, con la intención de determinar si se podía detectar el movimiento de las tropas alemanas sobre este camino desde el mar (se comenzaba a anticipar el comienzo del Tretiy Shturm o Tercer Asalto contra Sebastopol)[5]. Dado que era una misión de reconocimiento de alta prioridad, Avdeyev tenía prohibido atacar cualquier objetivo y debía evitar combatir contra cualquier caza enemigo, a menos que eso fuera inevitable. Pero al sobrevolar Yalta, sobre el mar Avdeyev divisó una lancha torpedera. El mismo cuenta que sucedió entonces:

Kapitan Mijail V. Avdeyev: “Teníamos el sol a nuestras espaldas, y de pronto claramente veo en el azul mar las blancas estelas de una torpedera. Ella iba a gran velocidad. Por lo que yo sabía, tales barcos aquí los alemanes no poseían. Eso solo podía significar – ¡qué era un buque de estado mayor!

¿Qué hacer? Observé. Miré a la izquierda y a la derecha. El cielo estaba limpio. Aviones enemigos no se veían. Escucho en los auriculares la voz de mi numeral:

-¡Misha! ¡A la izquierda veo una torpedera! ¿Qué hacemos?

¡Como si yo supiera que hacer! Es que en la orden claramente decía: ‘No entrar en combate bajo ninguna circunstancia’. Y mi amigo sabía eso muy bien. Si se enteraba Vasily Vasilyevich [Yermachenkov] – se enfurecería. ¿Qué hacer? Un minuto más, y en la torpedera nos divisarían. ¡Ser o no ser!

-¡Atacamos!

-¡Bien, atacamos! – un eco de alegría inmediatamente resonó en mis auriculares.

Puse mi avión en picado, coloqué la torpedera en el colimador y presioné el gatillo. La blanca cubierta de la torpedera se tinó de sangre. Figuras oscuras se arrojaban y se desplomaban sobre el puente. Las astillas hacían brotar restos por olas. Saliendo del picado, miré hacia atrás: el cañon y las ametralladoras de mi numeral golperaron con precisión el blanco.

Repetimos la pasada. La torpedera largaba humo espeso. ¡Parece que es su fin!

De nuevo nos pusimos en rumbo.

¡Si lo hubiera sabido entonces! […]

Esperamos hasta que termine el ataque de artilleria alemana y alguna manera aterrizamos entre los crateres, ocultamos y camuflamos en las caponeras nuestros aviones y seguidamente nos dirigimos hacia el refugio donde estaba el estado mayor.

-Acerca de la torpedera no le digas a nadie, –le advertí a Stepan- ¿Entendido?

-¡Como para no entender!

Pero Danilko me jugó una mala pasada. Bajo el mayor secreto le contó acerca del suceso al Capitán Katrov.  Y él a su comisario y al subcomandante. Después de algunos días días de nuestros ataque ya lo sabían muchos, menos el General Yermachenkov, quien nos había enviado a la misión de reconocimiento.

Pero de la intercepción de mensajes radiales alemanes pronto se enteró acerca del suceso en el mar, del cual nosotros habíamos participado. Establecer cuales ‘dos cazas’ aparecieron en ese momento y se invitaron al lugar de los hitlerianos no presentaba, por supuesto, ninguna dificultad.

Por lo demás, en honor a la justicia, he de decir que no nos castigaron por violar la orden.

Solo uno de nuestros compañeros dijo en broma: ‘Llegó a nuestros oídos, que se inscibieron en la lista de amigos personales de Von Manstein.’

Lancha Torpedera MAS de la Regia Marina italiana, similar a la MAS-571 que llevaba a Erich Von Manstein

y fue acribillada por los Yak-1 de Mijail Avdeyev y Stepan Danilko el 3 de junio de 1942.

Murieron el comandante italiano de esta, el jefe militar del puerto de Yalta Joachim Von Wedel,

y el chofer de Manstein, el Oberfeldwebel Fritz Nagal.

Generaloberst Erich Von Manstein: “De repente alrededor nuestro comenzaron a silbar, crujir y trinar balas y proyectiles. Sobre nuestra lancha se arrojaron dos cazas. Así ellos volaron hacia nosotros desde el lado del sol, y por eso no los vimos venir, y el sonido del motor de la torpedera nos impidió oir el ruido de sus motores. Tras algunos segundos, de las 16 personas que nos encontrabamos abordo, 7 estaban muertas o heridas. La lancha ardía. Esto era en extremo peligroso, porque así podían explotar los torpedos que estaban a bordo. 

El comandante de la lancha tomó las medidas para salvar la torpedera y a la gente… Pronto llegó otra torpedera y remolcó la dañada lancha hasta Yalta. Esto fue un viaje muy triste. Murió un suboficial italiano, fueron heridos tres marineros. Murió también el jefe del puerto de Yalta, el Capitán [Joachim] Von Wedel.”

La torpedera contra la que dispararon ambos Avdeyev y Danilko resultó ser la MAS-571 de la Regia Armada (la Armada Italiana), y el Generaloberst Erich Von Manstein -comandante en jefe del 11º Ejército y futuro Feldmarschall- se libró de la muerte por lo pelos.

Comienza el Tretiy Shturm (Tercer Asalto) contra Sebastopol

Erich Von Manstein realizaba esa exploración porque su 11º Ejército se aprestaba para lanzar el Tercer (y definitivo) Asalto contra Sebastopol. Los preparativos para la Operación Blau (la ofensiva de verano que según Hitler liquidaría de una vez por todas a la URSS, y que terminaría en la gran victoria soviética de Stalingrado) estaban casi ultimados, pero Hitler no quería tener una espina tan molesta como Sebastopol a sus espaldas. Y para esto Hermann Göering le había asignado la práctica totalidad del poderoso Fliegerkorps VIII al mando del muy profesional General der Flieger Wolfram Freiherr Von Richthofen para doblegar la resistencia de la base naval soviética.

Las fuerzas de las que disponía el Fliegerkorps VIII eran impresionantes: los III./JG 3, II. y III./JG 77 de caza (unos 127 Bf.109F-4), las KG 51, KG 76, II./KG 26, I./KG 100 y el III./LG 1 (247 bombarderos, 169 Ju.88A-4 y 78 He.111H-6) y toda la StG 77 (93 Ju.87B/R) – un total de 467 aviones de combate, a los que hay que sumar 61 aeronaves adicionales en funciones de reconocimiento y enlace. Contra esta armada aérea el 3º OAG podía oponer, a fines de mayo, 92 aeronaves – una docena de estos eran aviones de asalto Il-2, 43 eran cazas (14 Yak-1, cinco MiG-3, siete I-16, once I-153 y seis I-15bis) y 16 eran bombarderos (siete Pe-2, siete Il-4 y dos SB). Los soviéticos estaban, por lo tanto, en una inferioridad numérica de 5,7 a 1.

De hecho ya desde el 2 de junio Avdeyev y sus compañeros estaban ocupados interceptando oleada tras oleada de bombarderos del Fliegerkorps VIII que intentaban ablandar las defensas de la ciudad, y el 6º GIAP ChF había derribado tres aviones enemigos – un Ju.88A-4 del III./LG 1 (a manos de Konstantin Alekseyev), un Bf.109F-4 del 6./JG 77 y un Ju.87B-1 del 5./StG 77 (ambos por el Kapitan Aleksandr Katrov). A estos hay que agregar un Junkers del III./KG 76 seriamente averiado por el Leytenant Kosobyan.

El 3 de junio de 1942, poco despues de casi haber matado a Von Manstein, Avdeyev lideró sus Yak-1 de la 1ª AE/6º GIAP contra los incursores nazis. Mientras su escuadrilla mantenían ocupados a los Messerschmitt de escolta, los Yakovlev de la 3ª AE/9º IAP ChF interceptaban a los Junkers. Ambos grupos fueron bastante exitosos. Enfrentando a la escolta Mijail Avdeyev derribó al Bf.109F-4 WkNr 13254 (8./JG 77), y Konstantin Alekseyev acribilló el Bf.109F-4 WkNr 7323 (6./JG 77). Lo propio hicieron los pilotos que interceptaron a los bombarderos: el Kapitan David Nijamin derribó al Ju.88A-4 WkNr 5539 del II./KG 51 (uno de los miembros de la tripulación murió y el otro desapareció) y lo propio hizo Jrayev con un segundo Ju.88A-4 del I./KG 76. Todas estas pérdidas (que perfectamente coinciden con los reclamos de los pilotos soviéticos) oficialmente figuran como perdidos en accidente o por la artillería antiaérea rusa (¡cuánto esta no reclamó ningún derribo ese día!), lo cual hace pensar en que las pérdidas fueron tan humillantes y serias para los alemanes, que prefirieron ocultarlas como “operacionales”. En el lado negativo, el 3º OAG perdió un Yak y tres LaGG a manos de los experten germanos de la JG 77.

Dos días más tarde el 3º OAG realizó 39 salidas para interceptar a las aeronaves de la Luftwaffe. La mayoría de estas (29) la realizaron los Yak-1 de la unidad de Avdeyev, con el propio Mijail Vasilyevich reclamando abatir un Heinkel y un Messerschmitt en forma compartida con sus tres numerales – Alekseyev, Danilko y Katrov. Solo la primera de estas está confirmada por el lado germano – esta fue el He.111H-6 WkNr 7061 del 1./KG 100, que realizó un aterrizaje forzoso con un herido a bordo y fue dado de baja como chatarra.. Desgraciadamente, tres Yak fueron derribados por los Bf.109 alemanes.

Aún cuando ese día las cosas no les salieron bien a los aviadores soviéticos, ya habían impresionado a sus rivales germanos. Los pilotos del II. y III./JG 77, que ya llevaban siete meses combatiendo contra ellos,  sabían que solo podían esperar fiera resistencia de su parte. Por su parte, los recién llegados del I./JG 77 y del III./JG 3 -que hasta ese momento habían combatido en el Norte de África o en otras partes del frente oriental- se quedaron asombrados de lo duros que eran. El Staffelkapitan del 4./JG 77, el as Oberleutnant Heinrich Setz, contaba que sus primeros encuentros con los muy experimentados aviadores del 3º OAG fueron extremadamente duros. Según el historiador sueco Christer Bergstrom, “Los relatos soviéticos y alemanes indican que los aviadores navales soviéticos basados dentro de Sebastopol eran generalmente más rudos que sus contrapartidas alemanas. Varias afirmaciones hechas por aviadores de la Luftwaffe que volaron contra Sebastopol revelan cuan impresionados estaban los alemanes por la tenacidad mostrada por esos aviadores soviéticos.”

Choque de Titanes IV

Los pilotos de la 1ª AE/6º GIAP no solo interceptaban a los bombarderos alemanes, sino también escoltaban a los Il-2 del 18º ShAP y Pe-2 del 40º BAP. Durante la mañana del 7 de junio de 1942, efectuando una de tales misiones, se anotó su victoria Nº 13 – que en su caso resultó ser de muy buena suerte:

Kapitan Mijail V. Avdeyev: “Al amanecer del 7 de junio de 1942 cuatro capitanes – Danilin, Alekseyev, Katrov y yo, escoltábamos Shturmoviks a la zona de Balaklava. Apenas nos habíamos retirado al mar, para desapercibidamente llegar hasta las posiciones del XXX Cuerpo de Ejército alemán, cuando ante nuestros ojos  toda la herradura de las lineas del frente se señaló con fogonazos del lado del enemigo. Se levantaban negros penachos de las explosiones sobre nuestras posiciones. El cañoneo artillero crecía. Sobre el sector norte del frente y sobre Sebastopol pasaban grandes bandadas de los bombarderos hitlerianos. En el cielo aparecieron el humo blanco de las explosiones de los proyectiles antiaéreos. El bombardeo era especialmente fuerte en las montañas Kamishla y Mekenzievi Gory…

Los Ilyushin giraron hacia la costa apenas pasando Balaklava. Ahora ellos no necsitaban buscar su blanco. Este se les presentaba abiertamente. Los Shturmovik arrojaron las bombas sobre las baterías de artillería y comenzaron a ametrallarlas. Aparecieron 10 Me.109. Los arrastramos al combate, y no les dejamos llegar hasta los Shturmovik. Uno de ellos se desembarazó de la gresca general, e intentó atacar uno de los Il-2, pero Alekseyev lo advirtió a tiempo y lo derribó. Al segundo Me.109 lo derribé yo. Y un hitleriano más cayó en llamas hacia las montañas, pero quién lo incendió, no vimos. Los restantes ‘Messer’ se retiraron del combate.”

Esta vez las fuentes alemanas confirman los tres reclamos de los pilotos de Yak-1, y una vez más, la víctima de Avdeyev fue un laureado adversario: el Leutnant Wolfgang Verhagen debió saltar de su Bf.109F-4 WkNr 8334 en llamas y fue capturado por soldados soviéticos. Tenía en ese momento 11 victorias en su haber, y era uno de los pilotos más promisorios del 4./JG 77. La segunda victoria fue la obtenida por Konstantin Alekseyev (el Bf.109F-4 WkNr 13258, Unteroffizier Heinz Röhling, desaparecido, 8./JG 77). La tercera, obtenida por Aleksandr Katrov, no está confirmada por los registros alemanes pero si por el testimonio de la persona que sufrió en sus carnes la puntería de Katrov – el propio Geschwaderkommodore de la JG 77, el Hauptmann Gordon Gollob. Este hizo la siguiente anotación:

Hauptmann Gordon Gollob: “7.06.1942 – Mis cazas lograron nueve victorias, mientras que un oficial y un Unteroffizier están desaparecidos. Los rusos están dando una desesperada –y muy habilidosa- pelea. Derribé un LaGG-3, que cayó directo al suelo sobre el Aeródoromo Nº IV de Sebastopol y estalló en llamas. Pero estuve muy cerca de ser yo mismo derribado.  A duras penas me las arreglé para alcanzar nuestras líneas con un radiador destrozado.”

El LaGG-3 que Gollob menciona haber derribado es el de un piloto del 9º IAP llamado Ismakov, en una misión previa, que se transformó en su victoria Nº 102. Pero los demas datos de su relato lo ubican en Balaklava como la quinta victoria aérea del Leytenant Aleksandr Katrov. No sería la última vez que Gollob se libraría por los pelos de ser derribado y muerto por los pilotos navales soviéticos.

Los encuentros entre ases de ambos bandos fueron comunes en esos días, y no siempre concluyeron con una victoria soviética. El 8 de junio Alekseyev y Katrov combatieron contra seis Bf.109 del 4./JG 77. Katrov, el numeral de Alekseyev, ansioso de conseguir su sexta victoria, atacó a uno de los “Messer” pero dejando desprotegido a su líder. Atacado Katrov por un segundo Messerschmitt, Alekseyev corró a ayudarlo, solo para ser a su vez atacado y derribado por el experte alemán Oberleutnant Heinrich Setz, el Staffelkapitan del 4º Staffel. Alekseyev aterrizó de panza, y resultó seriamente herido, por lo que debió ser hospitalizado y evacuado fuera de Sebastopol. Perdía así Avdeyev a uno de sus pilotos más habilidosos, si bien solo en forma momentanea – se recuperaría y agregaría ocho victorias más a las 14 que tenía hasta ese momento. Ese día Mijail Vasilyevich reclamó su derribo Nº 14 –un Bf.109- pero este no esta confirmado por los registros alemanes de pérdidas.

Choque de Titanes V – Duelo Personal contra “Zeta”

En sus memorias Mijail Avdeyev recuerda que, durante esos duros combates de fines de mayo y principios de junio de 1942, hizo su aparición sobre Sebastopol un peligroso experte alemán, al que todos los pilotos del 6º GIAP apodaron “Zeta” porque la inscripción en el fuselaje de su Messerschmitt parecía una letra latina “Z”. Avdeyev mismo describe como era la forma de operar de este misterioso as:

Kapitan Mijail V. Avdeyev: “ ‘Zeta’ aparecía cada día, siempre con su espalda cubierta por otros cazas. Usualmente él elegía su víctima cuidadosamente, y solo raramente sus ataques no eran exitosos. Más de una vez traté de perseguir a este fascista, pero esto provó ser una empresa de lo más dificil: cuando se daban cuenta de que “Zeta” era atacado, los “Messers” de su escolta lo defendian a costa de todo, dandole la oportunidad para retirarse del combate.

Quedaba claro que ‘Zeta’ era un extraordinario piloto, ciertamente del círculo íntimo de Von Richthofen, o quizás Von Richthofen en persona…

El maldito ‘Zeta’ nos quitaba el sueño y no nos dejaba en paz. Era como si se burlara de nosotros.  Un centenar de veces estudié en mi mente formas de atacarlo – desde arriba, desde abajo, desde las nubes o desde el sol. Pero esas buenas teorías eran sacudidas por la realidad. ‘Zeta’ no era alguien que pudiera atraer a una trampa, o que lo traicionaran sus nervios con un ataque frontal. Era un digno oponente, y definitivamente nos dio un montón de dolores de cabeza.”

El historiador Christer Bergstrom ha propuesto una posible identidad para “Zeta” – el Oberleutnant Anton “Toni” Hackl, Staffelkapitan  del 5./JG 77, quién durante el Tercer Asalto a Sebastopol fue acreditado con 11 victorias (sus victorias Nº 52 a Nº 63, de un total de 192). Como comandante de Staffel, ciertamente es lógico que contara con la escolta de sus tres numerales.

Sin embargo hay otros candidatos, y el más impresionante de todos es el ya mencionado jefe de la JG 77 – el Hauptmann Gordon Gollob. Acreditado con 86 victorias en su palmarés al momento de ser designado Gruppenkomandeur de la JG 77 a mediados de mayo de 1942, durante la Operación Trappenjagd (la expulsión de las tropas soviéticas de la península de Kerch) fue acreditado con 15 victorias en solo cuatro días – sus Nº 87 a Nº 101. Como dijimos antes, su reclamo Nº 102 está confirmado por la VVS ChF (un LaGG-3 del 9º IAP). Es muy probable que su fama se difundiera entre sus adversarios soviéticos, y como comandante de ala, también contaba con cazas que cuidaran sus espaldas.

También es muy probable que los pilotos soviéticos mezclaran en una sola figura a todos los ases alemanes más destacados presentes en Crimea en ese momento – Hackl, Gollob, Heinrich Setz y Ernst-Wilhelm Reinert, dando así origen a la leyenda del terrible as teutón “Zeta”. Según los relatos soviéticos, “Zeta” encontró la horma de su zapato – Mijail Avdeyev.

En sus memorias Avdeyev no da una fecha precisa para su encuentro final con “Zeta”, solo dice que ocurrió “al otro día” de que “Zeta” derribara a Alekseyev (en este caso, “Zeta” resultó ser Heinrich Setz, como ya vimos), y ese mismo día más tarde Yermachenkov le informó a Avdeyev que iba a ser galardonado con la Zolotaya Svezda (Estella de Oro), y por lo tanto recibir el título de Geroy Soviestkogo Soyuza (Héroe de la Unión Soviética).

Esto último ha confundido a Christer Bergstrom, quién postula como fecha el 15 de junio, porque, habiendo leído Bergstrom en sus memorias que el duelo fue al día siguiente que Yermachenkov le dijo que iba a ser Geroy Soviestskogo Soyuza, y sabiendo que Avdeyev oficialmente fue galardonado con la Zolotaya Zvezda el 14 de junio, por ende deduce que el combate debió haber sido el día 15. Sin embargo Mijail Vasilyevich dice que sucedió “al otro día” de que Alekseyev fuera abatido, y esto ocurrió el 8 de junio. Además, si se leen las memorias con atención, se ve que Yermachenkov le dijo esto a Avdeyev en una charla informal, y por lo tanto la nominación formal fue varios días después. Todo esto ubica el quinto y último choque de titanes de Mijail Avdeyev  en el 9 de junio de 1942. Leamos como lo recordó el aviador bieloruso:

Kapitan Mijail V. Avdeyev: “Al otro día me fue posible encontrarme con ‘Zeta’. Ya había llegado la tarde.

Saliendo de Sebastopol, yo inesperadamente ví sobre nuestro aeródromo el odiado fuselaje rojo. Le rogué a todos los dioses que no se me detuviera el motor, que no me fallaran las armas, que no se me bajara la velocidad, que no sucediera nada.

El asunto aquí era de carácter personal y distintivo: ‘Zeta’ era mi pesadilla, mi obsesión, el símbolo de todo lo que más odiaba. ¡No debo dejarlo escapar, no espantarlo antes de tiempo! Rápidamente gano altura y también de manera rápida me aproximo a él. Hasta hoy aún no sé, que jugó un papel decisivo: si ‘Zeta’ bajó la guardia, o si mi ataque realmente lo tomó por sorpresa, solo sé que en el centro de mi colimador yo, por fín, no sin un sentimiento de placer, pude ver a ‘mi’ ‘pelirrojo’.

Disparé una ráfaga. Una segunda. Una tercera.

El avión pasa de largo.

Miro hacia atrás: ‘Zeta’, dejando detrás de sí una estela de humo, rapidamente se va para su territorio. Giro mi aparato. Pero ya es tarde: a mi encuentro se lanza una bandada de ‘Messers’. Ya no puedo llegar hasta ‘Zeta’. Hasta el día de hoy no sé - ¿lo derribé o no? ¿Era el mismísimo general Von Richthofen o alguno de sus allegados? Solo sé que ‘Zeta’ no volvió a aparecer. En vano seguimos buscando en el cielo su maquina de color gris-rojizo.”

La identidad de “Zeta” queda entonces clara al fín (aunque desgraciadamente Avdeyev nunca lo pudo saber): Hauptmann Gordon Gollob. El 9 de junio Gollob, tras haberse anotado su victoria Nº 103 (un I-153, el cual está confirmado por la VVS ChF) fue tomado por sorpresa  por el Yak-1 de Mijail Avdeyev, y su Bf.109F-4 WkNr 10266 aterrizó de panza, resultando destruido en un 35%, tal como el propio Gollob lo cuenta:

Hauptmann Gordon Gollob: “9.06.1942 – Luchamos a unas alturas entre 500 metros y casi rozando el suelo. Derribé un I-153, pero yo mismo fui también alcanzado y aterricé apenas detrás de nuestras líneas con un neumático en llamas del tren de aterrizaje.”

Hauptmann Gordon Gollob, Geschwaderkommodore de la JG 77 durante el Tercer Asalto contra Sebastopol en junio-julio 1942. Fue el as alemán que los pilotos soviéticos del 3º OAG en Sebastopol apodaban “Zeta”. El 9 de junio de 1942, tras derribar su víctima Nº 103 (un I-153), se transformó a su vez en la presa Nº 15 de Mijail Vasilyevich Avdeyev – Gollob debió hacer un aterrizaje de panza cerca de las líneas soviéticas con su Bf.109F-4 WkNr 10266, que resultó destruido en un 35%. Dos meses después, siendo ya Major y al mando de la JG 52, fue el primer piloto en ser acreditado con 150 victorias aéreas.

Esta fue la última victoria de Mijail Avdeyev durante la Segunda Defensa de Sebastopol. Al poco de ser galardonado con el título de Geroy Soviestkogo Soyuza (Héroe de la Unión Soviética), el 17 de junio Avdeyev y los pilotos supervivientes del 6º GIAP fueron evacuados desde Sebastopol al Cáucaso.  Eso hace coincidir su afirmación de que “Zeta” no volvió a aparecer – Gollob no reclamó sus victorias Nº 104 y 105 (un Il-2 y un LaGG-3) hasta el 18 de junio, cuando Avdyeyv ya se había retirado de Crimea. 

La decisión de evacuarlo a él y a sus hombres era sabia: le quedaba claro a la Stavka que desgraciadamente la fortaleza iba a caer, y comenzó a evacuar aquellos recursos humanos más valiosos, incluidos los pilotos más experimentados. Pero el verse forzado a abandonar sus amadas Sebastopol y Crimea causó un gran dolor al bieloruso. Por eso, Avdeyev termina sus memorias en el momento de la evacuación, citando un poema, en el que promete regresar. Transcribo la fonética rusa y su traducción:

En el Kubán. Regreso a Crimea

Pese a que Adveyev concluye sus memorias con la evacuación de Sebastopol y su promesa de regresar, su carrera militar durante el resto de la Gran Guerra Patria fue igualmente destacada (y es una lástima que no la haya documentado en una segunda parte de sus memorias) tanto guiando a otros pilotos al combate como en posiciones de mando. Durante el resto del año 1942 el 6º GIAP ChF fue llevado a la retaguardia para descanso y reequipamiento en el Cáucaso. Avdyeyev en particular fue asignado a transmitir su experiencia y conocimientos a los nuevos pilotos navales que se estaban formando, para que se adaptaran mejor a la dura realidad de combatir en el aire a la Luftwaffe.

Ascendido al rango de Mayor, Mijail Vasilyevich regresó al 6º GIAP ChF (ahora llamado Sebastopolskiy por su papel en la defensa de esta ciudad) a tiempo para participar en la batalla del Kubán. Durante esta agregó cuatro victorias a su palmarés – un Bf.109 el 15 de marzo de 1943, un Ju.87 en grupo dos días después, un Fw.189 el 9 de abril y un segundo Messerschmitt el 13 de mayo. Las dos primeras no tienen aún confirmación (las listas completas de las pérdidas de la Luftwaffe en marzo de 1943 no están disponibles), pero si las otras dos. El avión de reconocimiento Rama[7] que él abatió el 9 de abril sobre Gadyuk fue el Fw.189A-2 WkNr 125187 del 5.(F)/AGr 11, que acribillado y con tres heridos a bordo a duras penas llegó a su base Taganrog, pero una vez allí se estrelló y resultó destruido en un 85%, siendo dado de baja como chatarra (la Luftwaffe reconoce la pérdida el día 11). Con respecto al “Messer” reclamado el 13 de mayo sobre Mysjako, este resultó ser el Bf.109G-2 WkNr 19735 del 6./JG 52, dañado en un 25%. Durante el período enero-julio de 1943 el 6º GIAP ChF derribó 86 aviones alemanes (45 fueron cazas y los restantes 41 bombarderos/aviones de reconocimiento), pero perdió 33 aviones y 23 pilotos.

El Geroy Sovietskogo Soyuza (GSS) Mayor Mijail Avdeyev, posa orgulloso a principios de 1943 al lado del estabilizador vetical de su Yak-1, que luce 10 estrellas de victorias. En realidad para entonces su palmarés era de 15 (11 de ellas confirmadas por las fuentes alemanas), pero el solo contaba las victorias personales.

Su habilidad de mando durante la batalla del Kubán sin duda impresionó al Alto Mando de la VVS ChF. En parte eso se debía a la excelente relación que tenía con los hombres bajo su mando: Avdeyev era exigente con la disciplina, y tenía (utilizando una expresión moderna) una Tolerancia Cero con los pilotos cobardes o borrachos. Pero al mismo tiempo estaba continuamente atento a la moral de sus aviadores, y si se enteraba que alguno de ellos tenía un problema personal, intentaba ayudarlo o aconsejarlo. Por esa época comenzó a referire cariñosamente a sus hombres como “moi orly” (“mis aguilas”). Por eso en en julio de 1943 el Mayor Mijail Avdeyev fue designado comandante del 6º GIAP ChF. Un mes más tarde el regimiento cambió sus ya veteranos Yak-1 por los nuevos Yak-9D.

En agosto de 1943 el 6º GIAP ChF fue reequipado con Yak-9D. Esta es una fotografía del aparato personal del ya Podpolkovnik Mijail Avdeyev, con el Águila pintada del lado derecho.

Fue con esta nueva montura que desde principios del año siguiente el 6º GIAP, junto con el 25º IAP ChF (que estaba bajo el mando de su viejo amigo Konstantin Alekseyev) comenzaron a enfrentarse con las aeronaves alemanas situadas en Crimea. El 10 de enero de 1944, durante un combate sobre Mama Russkaya, el Podpolkovnik Mijail Avdeyev borró del cielo a dos nuevos Messerschmitt – el  Bf.109G-6 WkNr 420097 del Oberfeldwebel Karl Dannecker (5./JG 52) y el Bf.109G-4 WkNr 20994 del Feldwebel Karl-Heinz Ottern (6./JG 52). Ambos pilotos desaparecieron sin dejar rastros. “El Águila” había comenzado a cumplir la promesa  que le hizo a su amada Crimea – “My ujodim, chtoby vernut’sya” (Nos vamos, para regresar). Y lo había hecho de una manera contundente.

Su regimiento estuvo de nuevo en el centro de la acción cuando, el 8 de abril de 1944, comenzó la Liberación de Crimea, a cargo del 4º Frente Ucraniano. Solo ocho días después las tropas soviéticas habían liberado toda Crimea y estaban a las puertas de Sebastopol. Desgraciadamente, los primeros intentos de liberar la ciudad fueron infructuosos. Durante estos combates Avdeyev se anotó su última victoria aérea – un Bf.109 a fines de abril, durante una misión de escolta de Il-2.

Otoño de 1944. Tres GSS, de izquierda a derecha – Podpolkovnik Konstantin S. Alekseyev (comandante del 25º IAP ChF, 15 victorias personales + 7 en grupo), Podpolkovnik Mijail V. Adveyev (comandante del 6º GIAP ChF, 16 + 8 victorias), y uno de sus mejores hombres el Starshiy Leitenant Georgiy V. Moskalenko (7 derribos).

Podpolkovnik Mijail V. Avdeyev: “Cuando nuestros aviones ya completaban sus pasadas de ametrallamiento, desde el oeste apareció un gran grupo de bombarderos en picado Ju.87. Los ‘Laptiozhniki’ (‘Zancudos’), como los llamaban nuestros pilotos por su tren de aterrizaje no retraible, arrojaron sus bombas sobre el flanco derecho de nuestras tropas. Los Shturmovik abrieron fuego con sus cañones y ametralladoras contra los Junkers. Arrojando sus bombas sin ton ni son, los Ju.87 hicieron un giro de 180º y huyeron hacia el oeste.

Los cazas alemanes Me.109 se encontraban en este momento más alto que los Junkers. El par de Me.109 iban a la misma altura que nuestros cazas que cubrían a los Il-2. Inesperadamente, uno de los Yak, con el dibujo de un águila en el fuselaje, impetuosamente atacó al alemán, se acerco a él, y le disparó tres ráfagas cortas. Desde una altura de 1.500 metros el Me.109 se fue hacia abajo y se estrelló contra el agua.

Los  que observaron este corto combate –los infantes del Geroy Soviestkogo Soyuza Podpolkovnik de la Guardia Glavatskiy- aplaudieron a nuestro piloto. Me es grato recordar este episodio. Sobre todo porque el piloto de ese Yak era yo…”

Walter Wolfram fue uno de los mejores ases de la JG 52, acreditado con 137 victorias durante toda la guerra. Pero tambien conociС la derrota a manos del 'аguila' Mijail Avdeyev - el 30 de abril de 1944, cuando ya contaba 69 derribos, fue acribillado por el Yak-9D del bieloruso, y su Bf.109G-6 WkNr 411777 (5./JG 52) debiС ser dado de baja por estar muy daЯado.

Esta victoria no aparece en el listado de sus victorias oficiales, pero como se puede observar tras leer su relato, Avdeyev no tenía ninguna duda de que el “Messer” que él interceptó se estrelló en el suelo, que y su piloto no sobrevivió. En realidad hoy sabemos que este piloto alemán, quedó desmayado por la certera ráfaga de Avdeyev mientras atacaba los Il-2 (él creyó haber sido alcanzado por el artillero trasero). Pero a último momento, ya casi estrellándose contra el agua, recuperó el conocimiento, y pudo llegar llegar a base, el aeródormo de Grammatikova. Sin embargo, su “Messer” –el Bf.109G-6 WkNr 411777 del 5./JG 52- fue dado de baja. Lo interesante es que este piloto era otro experte – Walter Wolfram, acreditado con 69 derribos en ese momento, y que tendría 137 reclamos al momento del fin de la guerra. Poco después, el 12 de mayo de 1944 el 4º Frente Ucraniano liberó Sebastopol. Avdeyev había cumplido su promesa.

Dibujo del Yak-9D del Podpolkovnik Mijail Vasilyevich Avdeyev, comandante del 6º GIAP ChF, 1944. Con este aparato Avdeyev reclamó sus tres últimas victorias – todos Bf.109, sobre Crimea. Notese el dibujo del Águila.

A modo de comparación, mencionemos que la Wehrmacht, en teoría especialista en la Blitzkrieg, le tomó dos meses en 1941 ocupar toda Crimea, pero el Krasnaya Armiya (el Ejército Rojo) hizo lo mismo en solo ocho días.  El 11º Ejército necesitó ocho meses de asedio y un asalto de casi un mes (7 de junio al 4 de julio de 1942) para doblegar a Sebastopol. Al 4º Frente Ucraniano le tomó solo una semana – del 5 al 12 de mayo de 1944.

Mijail Vasilyevich Avdeyev conversa amigablemente con los tripulantes norteamericanos del B-24H Liberator BuNo 41-28920 a fines de mayo de 1944. Esta tripulación hizo un aterrizaje de emergencia en Crimea luego de haber recibido daños de combate en una misión contra la refinería de Ploesti en Rumania. Viendo que no podrían regresar al sur de Italia, su piloto decidió aterrizar en Crimea. Foto tomada por el corresponsal Yevgeniy Jaldey.

Cuatro Yak-9D del 6º GIAP ChF, fotografiados sobre la recientemente liberada Crimea, junio de 1944. El avión más cercano a la cámara está siendo tripulado por el GSS Mijail Ivanovich Grib, uno de los mejores pilotos de Avdeyev, acreditado con 10 victorias personales + 12 en grupo.

Otra foto de la misma secuencia.

La Postguerra. Consideraciones Adicionales

En noviembre de 1944 fue elegido para ir a la Academia de la VVS para realizar el curso de Estado Mayor, que finalizó en abril de 1945. Entre mayo de 1945 y marzo de 1964 ocupó diversos puestos de alto mando, y en esa fecha pasó a la reserva. Vivió en Moscú hasta el día de su muerte el 22 de junio de 1979.  Tenía solo 65 años. Está enterrado en el cementario de Kuntsevskoe.

Pese a ser acreditado oficialmente con “solo” 18 victorias (12 personales y 6 grupales), Mijail V. Avdeyev destaca entre otros ases soviéticos del período inicial de la guerra porque cinco de sus víctimas fueron ases adversarios, y los palamareses de dos de ellos –Wolf-Dietrich Huy y Gordon Gollob- superaban con mucho el suyo propio – Huy terminó la guerra con 40 victorias (el doble) y Gollob fue acreditado con 150 derribos (casi ocho veces de la cantidad de victorias de Avdeyev). Los escépticos que dudan de cualquier hazaña del bando soviético en la 2GM, se preguntarán: ¿Cómo es esto posible?¿Si era tan bueno, porque logró derribar “tan pocos” aviones alemanes?

La cantidad de victorias no indica inmediatamente la calidad del piloto, si bien es un buen indicador. En el caso de los experten de la Luftwaffe en el período incial de la guerra se ponía énfasis en conseguir victorias – cuantas más, mejor. Con ese objetivo en mente, los pilotos alemanes implementaban la táctica de la freie jagd  (caza libre), o sea sorprender a los aviones adversarios cerca de sus bases mientras despegaban o aterrizaban, cuando eran más vulnerables. ¿Efectuó misiones similares Avdyeyv en el período inicial de la guerra? No, las mayoría de sus salidas de combate eran de esolta de Il-2, en las que la misión no era acumular victorias, sino evitar que los Shturmovik fueran derribados por los Bf.109 adversarios. Por eso su tanteador no es tan elevado. Y en ese sentido Avdeyev tuvo mucho exito – solo una vez perdió un Il-2.

La calidad de las “presas” es otro factor a considerar. Tomando solo en consideración la cantidad de victorias de Avdeyev y Gollob, por ejemplo, uno debería llegar a la conclusión que el austríaco era 8 veces mejor piloto que el bieloruso. Pero uno puede observar que, por ejemplo, 10 de las 20 victorias que Gollob reclamó en el período de Trappenjagd y el asalto contra Sebastopol (sus reclamos Nº 87 al 107) eran modelos obsoletos y frágiles – nueve biplanos de ataque R-5 y un caza biplano I-153, sin blindaje, que se incendiaban fácilmente, y por ende más vulnerables. Avdeyev derribó “solo” tres bombarderos, pero estos eran los bien blindados He.111 y Ju.88, con depositios autosellantes y que contaban con ametralladoras para su autodefensa. Además, todos los cazas que derribó eran Bf.109E/F/G – iguales o ligeramente superiores en performance a sus Yak-1 y Yak-9D.

Por último está el tema del overclaiming (reclamar muchas más victorias de las que realmente luego pueden verificarse). Mirando la Tabla Nº 1 que está debajo, uno ve que Mijail Avdeyev no escapó a este fenómeno. Sin embargo, de sus 22 reclamos, 16 coinciden con aviones que la Luftwaffe efectivamente perdió o debió reparar (un 72,7%), contra un 27,3% de overclaiming. Y eso sin haber podido hacer un cruce de referencias de todos sus reclamos de marzo de 1943 y de 1944, en cuyo caso la proporción de reclamos verificados aumentaría y la de overclaiming descendería aún más.

Ademas, lamentablemente las listas de perdidas diarias alemanas estan incompletas, con lo que no todos los reclamos sovieticos pueden ser comprobados.

¿Cuáles serían los porcentajes de verificación y overclaiming de Gordon Gollob u otros de los experten  con los que Mijail Avdeyev se enfrentó? Dado que tanto Avdeyev como Gollob obtuveron una gran parte de sus victorias en el año 1942, se puede extrapolar de las cifras generales de la guerra aérea en ese año. Inmediatamente se ve una gran disparidad entre los reclamos de los pilotos alemanes y las pérdidas reales de la VVS. Por ejemplo, Christer Bergstrom muestra que en 1942 los pilotos de caza de la Luftwaffe reclamaron destruir 14.153 aeronaves soviéticas, cuando las pérdidas reales del RKKA en combate aéreo fueron 7.273 aviones aproximadamente (1.718 confirmados y el resto extrapolados, mirar aquí como hicimos el cálculo) – la mitad de lo reclamado por los pilotos alemanes fue correcto, y la otra restante fue overclaiming. Teniendo esto en mente, se ve que:

a)      Extrapolando el cálculo general a los palmareses de los ases que Avdyev derribó/obligó a hacer aterrizajes de emergencia en 1942 –Huy con 40, Werhagen con 11 y Gollob con 150- serían en realidad 20 para el primero, 6  para el segundo y 75 para el tercero.

b)      Avdeyev tiene un porcentaje de victorias confirmadas superior al promedio de los experten germanos: – 72,7% contra 41,9%. Ademas, Avdeyev oficialmente tiene 12 derribos personales y 6 grupales, de los cuales 16 son confirmados por los archivos alemanes. Avdeev reclama 22 (parte en sus memorias, que no le fueron adjudicados por los mandos sovieticos dado que solo 12+6 tiene en su lista oficial. Con lo que el su overclaim “oficial” seria aun menor.

Hay experten a los que les va mucho peor: las recientes investigaciones del historiador ruso Jazanov revelan  que, de las 352 victorias acreditadas al “as de ases” Erich Hartmann, realmente ocurrieron aproximadamente solo 80, lo cual significa un overclaiming del 77,3%). El artículo “Pishem 8, 2 v ume” (Escribimos 8, tenemos 2 en mente) muestra como, de las 92 aeronaves que Rudolf Müller reclamó en el Frente Ártico, solo derribó en realidad 37 (60% de overclaiming).

Lo cierto es que Mijail Vasilyevich Avdeyev les demostró contundentemente a seis de sus tan alabados oponentes germanos que los pilotos soviéticos no eran untermenschen. Por el contrario, probó que podían lucharles de igual a igual, y vencerlos.

Tabla Nº 1: Lista de victorias de Mijail Vasilyevich Avdeyev

(*) Según las memorias y los darios de vuelo de ambos Mijail V. Avdeyev y Konstantin D. Denisov. De acuerdo a los registros de ambas la VVS ChF y la Luftwaffe, Avdeyev derribó a Ditte el 30 de septiembre de 1941.

(G) = Victoria Grupal, compartida con otros pilotos.

Las entradas en rojo significan que son pérdidas que la Luftwaffe atribuye a una causa distinta que el combate aéreo y/o en una fecha ligeramente distinta.

AGRADECIMIENTOS:

Al ciudadano checo Jan Safarik, que me proporcionó la lista de pérdidas del I. y II./JG 52 en 1944. ¡Gracias Jan!

Por Diego Zampini